José Luis Cruz Amario

Diego Asensio Martínez
Senador por Almería y secretario provincial del PSOE

Escribo estas líneas desde la más dolorosa incredulidad. Por más que intento hacerme a la idea de su marcha, me cuesta creer que mi compañero José Luis no esté ahora mismo paseando por las calles de Vélez Rubio, con su eterno sombrero y su mirada de hombre bueno.

Desde que nos conocimos allá por los años 80, traté siempre a José Luis Cruz Amario con una mezcla de admiración y cercanía. Admiración, porque era mayor que yo y pronto comprendí que podía aprender mucho de él. Cercanía, porque era un hombre al que no le gustaban los protocolos ni esconderse detrás de formalidades.

Por eso se granjeó pronto mi cariño. Por entonces, yo era un militante socialista de Cuevas del Almanzora y él, diputado provincial y concejal de Cultura en Vélez Rubio. Su pueblo y el mío fueron los primeros en contar con una escuela taller, y ahí empezó a estrecharse nuestra relación.

Si tuviera que escoger una palabra para definir a José Luis, escogería “compromiso”. Él fue un hombre comprometido con sus ideales socialistas y, sobre todo y ante todo, con Los Vélez.

Su participación en la vida orgánica del PSOE fue intensa. José Luis fue un integrante activo de la Ejecutiva Provincial durante muchos años y participó también en numerosos comités electorales. Pero por lo que de verdad será recordado, es por su amor por su tierra. José Luis Cruz Amario fue uno de los mejores alcaldes que ha tenido Vélez Rubio y un defensor acérrimo de su comarca. Siempre defendió el sentimiento comarcal y buscó para la histórica tierra que lo vio nacer el mejor de los futuros.

Porque supo despertar el cariño de todos los que lo conocimos; porque fue fiel a sus principios hasta el último de sus días; porque fue valiente y luchó, por su vida y por la de aquellos que aquí deja, quede constancia de mi agradecimiento a José Luis y mi sincero abrazo a su familia.

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