Eugenio Narbaiza
Periodista
Una vez más pensar que la política y los políticos tienen lógica y que sirven a los intereses de los ciudadanos, queda desmentido.Los trabajadores de Elsur, empresa mixta participada por una constructora, dos entidades bancarias y el ayuntamiento de El Ejido, han acudido al parlamento andalúz a pedir soluciones a su problema, generado por una mala gestión de los responsables políticos, que han utilizado a Elsur para enriquecerse y vuelven sin soluciones.Todo lo que han recibido es la solidaridad de los responsables de gobierno y la negativa rotunda a que el ayuntamiento de El Ejido pueda disolverse. Para ello, utilizan la excusa de que la situación económica del consistorio ejidense no se puede equiparar con Marbella, municipio también esquilmado por los representantes políticos, sino con la del ayuntamiento de La Linea, en donde su problemática es fundamentalmente el nivel de endeudamiento de la corporación.
En este sentido, los responsables del gobierno de la Junta de Andalucía se desentienden de El Ejido vergonzosamente, puesto que la situación real de todo el problema viene generada por la gestión de una empresa mixta, que a pesar de estar participada por el ayuntamiento, éste no tiene la mayoría en el consejo de administración, lo que de alguna manera traslada también la responsabilidad y la solución del problema de los trabajadores a todo el accionariado de Elsur.
Desde el punto de vista político, la no disolución de la actual corporación y el nombramiento de una gestora hasta la celebración de las próximas elecciones municipales resulta incomprensible, porque únicamente se perjudica a toda una ciudad y a sus ciudadanos, cuando éstos no tienen la culpa ni han generado el saqueo de fondos que supuestamente han realizado los imputados en la Operación Poniente. En este caso no vale decir que el tema de El Ejido se está utilizando politicamente por el PP, ya que eso no es una respuesta que debe dar ni una administración pública ni el partido que la sustenta, porque con sus actuaciones, tanto el partido gobernante como la administración autonómica, tienen la obligación de solucionar los problemas de los ciudadanos y no tener la postura irracional e incomprensible que se está manteniendo en el caso de El Ejido.
Aquí cabe preguntarse el porqué de esta actitud. ¿Existen intereses oscuros que impiden algo tan lógico como el hacer que los que han esquilmado a El Ejido sigan en sus puestos? ¿El PSOE es consciente del año económico y político que está propiciando a El Ejido al mantener a Enciso y permitir que el caos económico y en la gestión siga vigente? ¿ El PSOE está dispuesto a pagar su actitud tan irracional en las urnas?
En este sentido, los responsables del gobierno de la Junta de Andalucía se desentienden de El Ejido vergonzosamente, puesto que la situación real de todo el problema viene generada por la gestión de una empresa mixta, que a pesar de estar participada por el ayuntamiento, éste no tiene la mayoría en el consejo de administración, lo que de alguna manera traslada también la responsabilidad y la solución del problema de los trabajadores a todo el accionariado de Elsur.
Desde el punto de vista político, la no disolución de la actual corporación y el nombramiento de una gestora hasta la celebración de las próximas elecciones municipales resulta incomprensible, porque únicamente se perjudica a toda una ciudad y a sus ciudadanos, cuando éstos no tienen la culpa ni han generado el saqueo de fondos que supuestamente han realizado los imputados en la Operación Poniente. En este caso no vale decir que el tema de El Ejido se está utilizando politicamente por el PP, ya que eso no es una respuesta que debe dar ni una administración pública ni el partido que la sustenta, porque con sus actuaciones, tanto el partido gobernante como la administración autonómica, tienen la obligación de solucionar los problemas de los ciudadanos y no tener la postura irracional e incomprensible que se está manteniendo en el caso de El Ejido.
Aquí cabe preguntarse el porqué de esta actitud. ¿Existen intereses oscuros que impiden algo tan lógico como el hacer que los que han esquilmado a El Ejido sigan en sus puestos? ¿El PSOE es consciente del año económico y político que está propiciando a El Ejido al mantener a Enciso y permitir que el caos económico y en la gestión siga vigente? ¿ El PSOE está dispuesto a pagar su actitud tan irracional en las urnas?
La verdad es que todo lo que viene pasando en El Ejido no es que sea vergonzoso, es descorazonador porque ante un pueblo que clama soluciones, unicamente se recibe la respuesta de que se solidarizan con el problema, pero no lo resuelven porque no quieren y lo triste también es que se quiera descalificar a la oposición acusándoles de electoralismo, cuando lo que realmente está preocupando, es la situación de la localidad. Por ello, quizás nuevamente oigamos cosas en este sentido a partir del próximo día 22 en donde Javier Arenas se va a reunir con los representantes de los trabajadores de Elsur a fin de estudiar de manera conjunta qué soluciones pueden plantearse ante este problema, que hace que el PSOE quede a la altura de los imputados en la Operación Poniente, que el consejero de empleo, almeriense de nacimiento, quede como ha quedado, como un desinteresado en los problemas de su provincia y que, en definitiva, El Ejido siga sumido en el desgobierno, en el caos económico y en el ejemplo de una verguenza política tremenda para la clase política andaluza.
(noticiasdealmeria.com)
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