Gana Eugenio, gana Gádor

Javier Aurealiano García

Secretario Provincial del Partido Popular

Los que mienten deben tener obligatoriamente buena memoria, porque siempre necesitan nuevas mentiras que continúen sosteniendo su primera falsedad. Por eso sorprende que, con la buena memoria que parecían tener los concejales socialistas hace unos meses, estén ahora callados como lo que usted y yo sabemos no decimos por respeto.

¿Qué tendrían que decir los concejales y cargos del PSOE almeriense que meses atrás emprendieron una injusta campaña de difamación, amenazas y escarnio contra el alcalde de Gádor, Eugenio Gonzálvez? ¿Qué tendrían que hacer los que le acusaron de comenter delitos y los que se empeñaron en emponzoñar y enfangar la vida de esa localidad intentando ganar en los tribunales lo que el buen criterio de los gadorenses a la hora de votar les viene negando desde hace años? En mi opinión, sólo dos cosas. La primera, pedir perdón. Y la segunda, marcharse de la vida política almeriense después de haber acreditado su indignidad y su escasa hombría de bien. Y como han actuado como lo que son, es decir, personas marcadas por el sectarismo y la frustración, no harán ninguna de las dos cosas.

Escribo estas líneas desde la satisfacción de ver que los tribunales han acabado poniendo las cosas en su sitio: a mi amigo Eugenio, aclamado y recibido como un buen alcalde y un buen hombre por las calles de Gádor, y a los concejales socialistas, a los pies de los caballos.ç

Pero también quiero acordarme en este momento de todas las personas que, desde dentro y fuera del Partido Popular de Almería, han sentido a lo largo de estos meses el peso atroz de la injusticia y la orquestación política contra un buen hombre y un gran alcalde. Todas esas personas pueden sentir ahora que, a pesar de todo, merece la pena seguir el ejemplo de Eugenio Gonzálvez y su permanente vocación de servicio público y de trabajo desprendido en todos y cada uno de los puestos y cargos que le ha tocado desempeñar, bien por expreso deseo de sus vecinos o por el acuerdo de sus compañeros de partido. Merece la pena trabajar por los vecinos y por las gentes de todas nuestras ciudades y pueblos, porque ese encargo y esa responsabilidad nos obliga a dar el máximo de nuestra capacidad y esfuerzo por el bienestar común de todos y por el crecimiento y progreso de Almería. Así lo ha entendido siempre Eugenio y muchos otros que, como él, han sabido trasladar a la gestión pública el compromiso y la firmeza de unos valores e ideas centradas en estar cerca de la gente y ayudarlas a resolver sus problemas. La gestión de Eugenio Gonzálvez al frente del Ayuntamiento de Gádor no ha tenido ni más norte ni más sur que la promoción, la mejoría, el desarrollo y el crecimiento del pueblo. Así lo llevan entendiendo los gadorenses desde hace décadas, respaldándole y eligiéndole elección tras elección. Y eso es algo que los socialistas no le podían perdonar a Eugenio.

Pero han errado en su cálculo y se han abonado a estar de por vida en la oposición, porque será difícil que la gente de Gádor olvide que los concejales socialistas intentaron ganar la alcaldía en los tribunales, en vista de que no podían o sabían hacerlo de buena lid en las urnas.

Gádor seguirá creciendo y progresando con Eugenio y con su equipo. Y cuando el alcalde de Gádor comparezca de nuevo ante los ciudadanos para pedirles el voto, podrá seguir mostrando, además de un balance claro de proyectos, obras y mejoras para su pueblo, la cabeza bien alta. Otros no podrán decir nunca lo mismo.