Celso Ortiz
Si analizamos la historia reciente de Almería, Juan Enciso ha sido uno de los pilares fundamentales del Partido Popular, algo absolutamente incuestionable basado en el dato objetivo de haber alcanzado la Alcaldía de El Ejido bajo sus siglas durante cuatro legislaturas seguidas. Siendo alcalde el señor Enciso y gobernando con mayoría absoluta del PP se produjeron los desafortunados hechos xenófobos por los que el nombre de El Ejido dio la vuelta al Mundo. Dichos sucesos no sólo fueron reprobables por su propia naturaleza, sino que produjeron daños colaterales para el municipio, cuyos productos agrícolas sufrieron un importante boicot en el mercado europeo. Sin embargo Juan Enciso recibió el respaldo de la que, por entonces, era presidenta del PP de Andalucía, Teófila Martínez, y del Gobierno de José María Aznar, representado en la provincia por el Subdelegado Fernando Hermoso, que hizo piña con el alcalde.
En las elecciones municipales del año 2003 es el PP quien gana la Diputación y los diputados populares premian a Enciso eligiendo como presidente a un enviado suyo, José Añez, cuya ambición de poder empieza a minar el equipo de gobierno hasta que se produce el estallido y, en un arrebato, se cepilla a la mayoría de los diputados que lo hicieron presidente y la corporación se queda tiritando sobre tres patas. Hasta aquí todo se amasa en el seno del PP y sus guerras internas no se derivan de divergencias ideológicas, sino de una lucha fraticida por el poder.
Con semejante currículo, el PSOE, que no tenía vela en ese entierro, entra en juego, primero, echándole un capote a José Añez, sosteniendo la disparatada situación de una diputación gobernada por tres personas y, segundo, pactando con el PAL, el partido que se inventa Enciso tras la ruptura con el PP.
Nunca sabremos cómo habría sido la situación del Partido Popular en Almería tras la ruptura, si los socialistas se hubieran mantenido al margen de una guerra que no era la suya, pero, al día de hoy, con el marrón de la Operación Poniente flotando en el aire, la trayectoria de Juan Enciso vinculada a dicho partido durante los años que ha gobernado el Ayuntamiento del El Ejido, ha caído en el olvido. Ello se debe a la torpeza de los tres responsables y únicas voces con predicamento en el PSOE de Almería y me refiero, porque no es ningún secreto, a Martín Soler, Diego Asensio y Segura Vizcaíno, que por compartir mesa con el PAL en el último capítulo, le han dado la vuelta a la tortilla, y lo que hoy podría analizarse como un fracaso de la derecha en su conjunto, no parece que salpique al Partido Popular que, en definitiva, es el padre de la criatura.
En las elecciones municipales del año 2003 es el PP quien gana la Diputación y los diputados populares premian a Enciso eligiendo como presidente a un enviado suyo, José Añez, cuya ambición de poder empieza a minar el equipo de gobierno hasta que se produce el estallido y, en un arrebato, se cepilla a la mayoría de los diputados que lo hicieron presidente y la corporación se queda tiritando sobre tres patas. Hasta aquí todo se amasa en el seno del PP y sus guerras internas no se derivan de divergencias ideológicas, sino de una lucha fraticida por el poder.
Con semejante currículo, el PSOE, que no tenía vela en ese entierro, entra en juego, primero, echándole un capote a José Añez, sosteniendo la disparatada situación de una diputación gobernada por tres personas y, segundo, pactando con el PAL, el partido que se inventa Enciso tras la ruptura con el PP.
Nunca sabremos cómo habría sido la situación del Partido Popular en Almería tras la ruptura, si los socialistas se hubieran mantenido al margen de una guerra que no era la suya, pero, al día de hoy, con el marrón de la Operación Poniente flotando en el aire, la trayectoria de Juan Enciso vinculada a dicho partido durante los años que ha gobernado el Ayuntamiento del El Ejido, ha caído en el olvido. Ello se debe a la torpeza de los tres responsables y únicas voces con predicamento en el PSOE de Almería y me refiero, porque no es ningún secreto, a Martín Soler, Diego Asensio y Segura Vizcaíno, que por compartir mesa con el PAL en el último capítulo, le han dado la vuelta a la tortilla, y lo que hoy podría analizarse como un fracaso de la derecha en su conjunto, no parece que salpique al Partido Popular que, en definitiva, es el padre de la criatura.
Querido Celso: ¿Chaves no sabía nada al respecto? ¿Se enteró por la prensa? Martín le vendió una burra averiada y a Chaves le encantó comprarla. Mucha gente informó a Chaves de lo que pasaba en Almería,y el no solo lo consentía, sino que lo apoyaba. ¿Quien quitó de enmedio a Marí Carmen Ortiz?
ResponderEliminarSigan la pista del dinero: la clave es ABENGOA.
Aqui contamos la historia según nos interesa.El PSOE tiene la responsabilidad de mucho de lo que está pasando en EL EJIDO porque es complice moral de Enciso o que hacían Segura Vizcaino y Alemán en sus conversaciones? Repartirse el poder, subvenciones etc o contarse chistes?¿Se olvida Ud del mitin de Chavés en el Hotel Ejido en donde le ofreció un pacto de gobierno a Enciso?El PAL, EL PSOE en todo lo referente a El Ejido son la muestra de lo que resulta indigno en política.
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