Manuel Recio
Consejero de Empleo de la Junta de Andalucía
La tarea de averiguar los planes que tiene Mariano Rajoy en el supuesto hipotético de que ganara las próximas elecciones se ha convertido en un juego de sombras chinescas reflejadas en la fachada del número 10 de Downing Street, sede del Gobierno británico que dirige el conservador David Cameron. Gracias a la política de Cameron, que es la envidia de Rajoy como él mismo ha confesado, sabemos ya una parte de lo que haría la derecha española si llegara a gobernar. Lo primero sería acometer un recorte brutal del Estado de bienestar, una reducción sin precedentes del empleo público.
El lema de Cameron es "se acabó el vivir del cuento". La receta de la derecha ante la crisis es la vuelta a la ley de la jungla, aunque sea a costa de provocar profundas desigualdades. La filosofía de la derecha es que la culpa del paro la tienen los parados, a los que acusa de ser unos cuentistas que no quieren trabajar y viven a expensas del Estado. Por lo tanto, los británicos que quieran seguir cobrando el desempleo tendrán que aceptar a partir de ahora cualquier trabajo que se les ofrezca en labores como la recogida de basuras, el cuidado de ancianos o atender a enfermos. Quien no lo haga será severamente sancionado. A la lista del paro irán sumándose próximamente en Inglaterra alrededor de medio millón de empleados públicos.
Ése es el ejemplo que Rajoy quisiera seguir en España. Frente a eso, ¿cuál es nuestro modelo en Andalucía? Nosotros partimos del convencimiento de que la inmensa mayoría de los desempleados lo son por causas ajenas a su voluntad. Son las principales víctimas de una crisis que ni han provocado ni conviene a sus intereses. Nuestro lema no es "se acabó el vivir del cuento", sino protección para los desempleados y ayuda para salir del paro mediante mejoras en la empleabilidad. Para la derecha, la crisis es una excusa para adelgazar el Estado del bienestar; para la izquierda, una razón para mejorarlo.
Por eso nosotros estamos empeñados en una reforma que avance en mejoras como el Plan Motiva para jóvenes desempleados y el Plan 45 Plus para mayores de 45 años, que prevén 485 millones de euros para mejorar la empleabilidad en los próximos años. De ello se van a beneficiar alrededor de 215.000 andaluces. Como novedad principal, los participantes deberán suscribir como paso previo a su participación en estos planes un Compromiso para la Empleabilidad, un acuerdo mutuo por el que el usuario se responsabiliza de mantener una actitud activa en el proceso y por el que el SAE se compromete a diseñar acciones personalizadas "a medida" que mejoren su empleabilidad. Además, el dossier de formación, disponible de manera actualizada en la oficina virtual del SAE, contendrá las acciones formativas de cada momento y las especialidades profesionales más demandadas por las empresas. El Plan Motiva contiene cinco grandes ejes de actuación: proyectos profesionales; formación para el empleo; experiencias profesionales; fomento de la movilidad laboral y fomento del empleo y del espíritu emprendedor.
No es cuestión de realizar aquí un pormenorizado recuento de todas y cada una de las medidas para fomentar el empleo que estamos desarrollando en Andalucía, pero quiero resaltar las innegables diferencias de políticas de empleo a la hora de salir de la crisis: los partidos de derechas, lo mismo el conservador británico que el PP español, lo hacen a costa de las clases más desfavorecidas, mientras que los socialistas respondemos con protección de los débiles e incentivos para mejorar las condiciones de empleabilidad de los parados.
Hay otras diferencias. Nosotros universalizamos el derecho a la educación y a la salud, que ellos privatizan. Creamos la Ley de Dependencia que ellos no aplican donde gobiernan. Introducimos las pensiones no contributivas y elevamos las más modestas, auspiciamos la concertación social con empresarios y sindicatos. Cuando gobernaron, ellos redujeron los gastos sociales, congelaron las pensiones. Andalucía ha aumentado el 9,25% el gasto en políticas de empleo, mientras en Madrid Esperanza Aguirre lo ha reducido un 4%, en Valencia Camps recorta el 3,05 y en Galicia, Feijoo, nada menos que el 8%.
Mala estrategia me parece que Mariano Rajoy reivindique las políticas de David Cameron. Su Gobierno ha emprendido los mayores recortes sociales desde la Segunda Guerra Mundial y ha anunciado enormes aumentos de las tasas universitarias, lo que ha provocado que los estudiantes se echen a la calle para protestar. Que Rajoy tome nota. Además, ¿qué actividad económica absorberá el medio millón de empleados públicos que engrosarán el paro? Choca la dureza del ajuste social británico con la contratación por el Gobierno de Londres de un grupo de estilistas, fotógrafos y asesores personales para mejorar la imagen de Cameron y de su esposa Samantha.
El lema de Cameron es "se acabó el vivir del cuento". La receta de la derecha ante la crisis es la vuelta a la ley de la jungla, aunque sea a costa de provocar profundas desigualdades. La filosofía de la derecha es que la culpa del paro la tienen los parados, a los que acusa de ser unos cuentistas que no quieren trabajar y viven a expensas del Estado. Por lo tanto, los británicos que quieran seguir cobrando el desempleo tendrán que aceptar a partir de ahora cualquier trabajo que se les ofrezca en labores como la recogida de basuras, el cuidado de ancianos o atender a enfermos. Quien no lo haga será severamente sancionado. A la lista del paro irán sumándose próximamente en Inglaterra alrededor de medio millón de empleados públicos.
Ése es el ejemplo que Rajoy quisiera seguir en España. Frente a eso, ¿cuál es nuestro modelo en Andalucía? Nosotros partimos del convencimiento de que la inmensa mayoría de los desempleados lo son por causas ajenas a su voluntad. Son las principales víctimas de una crisis que ni han provocado ni conviene a sus intereses. Nuestro lema no es "se acabó el vivir del cuento", sino protección para los desempleados y ayuda para salir del paro mediante mejoras en la empleabilidad. Para la derecha, la crisis es una excusa para adelgazar el Estado del bienestar; para la izquierda, una razón para mejorarlo.
Por eso nosotros estamos empeñados en una reforma que avance en mejoras como el Plan Motiva para jóvenes desempleados y el Plan 45 Plus para mayores de 45 años, que prevén 485 millones de euros para mejorar la empleabilidad en los próximos años. De ello se van a beneficiar alrededor de 215.000 andaluces. Como novedad principal, los participantes deberán suscribir como paso previo a su participación en estos planes un Compromiso para la Empleabilidad, un acuerdo mutuo por el que el usuario se responsabiliza de mantener una actitud activa en el proceso y por el que el SAE se compromete a diseñar acciones personalizadas "a medida" que mejoren su empleabilidad. Además, el dossier de formación, disponible de manera actualizada en la oficina virtual del SAE, contendrá las acciones formativas de cada momento y las especialidades profesionales más demandadas por las empresas. El Plan Motiva contiene cinco grandes ejes de actuación: proyectos profesionales; formación para el empleo; experiencias profesionales; fomento de la movilidad laboral y fomento del empleo y del espíritu emprendedor.
No es cuestión de realizar aquí un pormenorizado recuento de todas y cada una de las medidas para fomentar el empleo que estamos desarrollando en Andalucía, pero quiero resaltar las innegables diferencias de políticas de empleo a la hora de salir de la crisis: los partidos de derechas, lo mismo el conservador británico que el PP español, lo hacen a costa de las clases más desfavorecidas, mientras que los socialistas respondemos con protección de los débiles e incentivos para mejorar las condiciones de empleabilidad de los parados.
Hay otras diferencias. Nosotros universalizamos el derecho a la educación y a la salud, que ellos privatizan. Creamos la Ley de Dependencia que ellos no aplican donde gobiernan. Introducimos las pensiones no contributivas y elevamos las más modestas, auspiciamos la concertación social con empresarios y sindicatos. Cuando gobernaron, ellos redujeron los gastos sociales, congelaron las pensiones. Andalucía ha aumentado el 9,25% el gasto en políticas de empleo, mientras en Madrid Esperanza Aguirre lo ha reducido un 4%, en Valencia Camps recorta el 3,05 y en Galicia, Feijoo, nada menos que el 8%.
Mala estrategia me parece que Mariano Rajoy reivindique las políticas de David Cameron. Su Gobierno ha emprendido los mayores recortes sociales desde la Segunda Guerra Mundial y ha anunciado enormes aumentos de las tasas universitarias, lo que ha provocado que los estudiantes se echen a la calle para protestar. Que Rajoy tome nota. Además, ¿qué actividad económica absorberá el medio millón de empleados públicos que engrosarán el paro? Choca la dureza del ajuste social británico con la contratación por el Gobierno de Londres de un grupo de estilistas, fotógrafos y asesores personales para mejorar la imagen de Cameron y de su esposa Samantha.
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