Eugenio Narbaiza
Periodista
Patrocinada por el gobierno central y con ayudas de la Consejeria de Innovación de la Junta de Andalucía, una emisora de radio, instalada en el instituto La Gaviota de Adra, está siendo utilizada por el PSOE y particularmente por el vicepresidente de la diputación Luis Pérez para hacer tertulias políticas en las que unicamente participan personas afines a este partido, utilizando además el organismo provincial ACL (Agencia de Comunicación Local), dependiente de la Diputación Provincial, del que se realizan conexiones y emisiones de sus boletines informativos, como plataforma para propaganda política de dicho partido. Para ello, no han dudado en utilizar también a una asociación denominada Retahila, que ha sido la que les ha proporcionado los equipos de emisión y quien hace una tertulia política para los abderitanos los sábados por la mañana.
Esta situación, irregular, ha origninado que desde las filas del PP en el Parlamento andaluz se hayan presentado sendas preguntas a la administración andaluza para conocer si es lícito o no que en una emisora de radio de carácter cultural se pueden emitir programas de contenido político, teniendo en cuenta que sus contenidos constituyen de alguna manera una deformación de lo que debe ser en realidad un taller de radio, dirigido a los jóvenes de la localidad, teniendo en cuenta que en el mismo, deben ser precisamente los alumnos del mencionado instituto y no personas ajenas al mismo, los que participen y elaboren los programas de dicho taller de radio.
Una vez más, en la política almeriense, se está perdiendo la vergüenza y podemos comprobar cómo desde algunos sectores políticos no se tienen escrúpulos de ningún tipo para intentar que el ciudadano, de una u otra manera, reciba una información sesgada basada en su realidad para la consecución de sus fines políticos. Porque ¿qué pinta el Vicepresidente de la Diputación en una tertulia política sabatina en la que la política es el pan nuestro de cada día, en una emisora de radio de un instituto de enseñanza? La verdad es que esto no tiene calificativo, porque si es totalmente positivo que los jóvenes conozcan y practiquen en el mundo de la comunicación, esto se tiene que hacer desde el punto de vista educativo y no desde el punto de vista político.
Lo que aquí esta ocurriendo realmente es que al ser el ayuntamiento de Adra del PP y teniendo en cuenta que desde la ruptura, si se le puede llamar así, del PSOE con el PAL, el PSOE de la localidad abderitana se quedó desamparado para hacer llegar sus opiniones, al no contar con la inestimable plataforma que en su día le suponía la radio municipal ejidense con sus conexiones con la ACL, y un ínclito locutor que no quiero nombrar, el PSOE de Adra, necesitaba una plataforma para llegar a los ciudadanos y así contar sus cosas.
Yo me pregunto si en estos programas de radio, el vicepresidente de la Diputación ha contado a sus conciudadanos que el Secretario de Organización de su partido en la localidad, después de jubilarse como funcionario de Correos por padecer una enfermedad psicofisica, según han denunciado en un medio de comunicación de ámbito nacional, puede seguir siendo el responsable de recaudación de la Diputación Provincial, a pesar de que se ha comprobado por las investigaciones realizadas por el medio nacional en cuestión que ni tan siquiera aparece ni se le conoce en su puesto de trabajo. Seguramente no, porque, claro, ya pasaron una situación apurada con el tema de los asesores de la Diputación y ¿para qué contar a los ciudadanos que un miembro de su partido en Adra está en esa situación?
Esta situación, irregular, ha origninado que desde las filas del PP en el Parlamento andaluz se hayan presentado sendas preguntas a la administración andaluza para conocer si es lícito o no que en una emisora de radio de carácter cultural se pueden emitir programas de contenido político, teniendo en cuenta que sus contenidos constituyen de alguna manera una deformación de lo que debe ser en realidad un taller de radio, dirigido a los jóvenes de la localidad, teniendo en cuenta que en el mismo, deben ser precisamente los alumnos del mencionado instituto y no personas ajenas al mismo, los que participen y elaboren los programas de dicho taller de radio.
Una vez más, en la política almeriense, se está perdiendo la vergüenza y podemos comprobar cómo desde algunos sectores políticos no se tienen escrúpulos de ningún tipo para intentar que el ciudadano, de una u otra manera, reciba una información sesgada basada en su realidad para la consecución de sus fines políticos. Porque ¿qué pinta el Vicepresidente de la Diputación en una tertulia política sabatina en la que la política es el pan nuestro de cada día, en una emisora de radio de un instituto de enseñanza? La verdad es que esto no tiene calificativo, porque si es totalmente positivo que los jóvenes conozcan y practiquen en el mundo de la comunicación, esto se tiene que hacer desde el punto de vista educativo y no desde el punto de vista político.
Lo que aquí esta ocurriendo realmente es que al ser el ayuntamiento de Adra del PP y teniendo en cuenta que desde la ruptura, si se le puede llamar así, del PSOE con el PAL, el PSOE de la localidad abderitana se quedó desamparado para hacer llegar sus opiniones, al no contar con la inestimable plataforma que en su día le suponía la radio municipal ejidense con sus conexiones con la ACL, y un ínclito locutor que no quiero nombrar, el PSOE de Adra, necesitaba una plataforma para llegar a los ciudadanos y así contar sus cosas.
Yo me pregunto si en estos programas de radio, el vicepresidente de la Diputación ha contado a sus conciudadanos que el Secretario de Organización de su partido en la localidad, después de jubilarse como funcionario de Correos por padecer una enfermedad psicofisica, según han denunciado en un medio de comunicación de ámbito nacional, puede seguir siendo el responsable de recaudación de la Diputación Provincial, a pesar de que se ha comprobado por las investigaciones realizadas por el medio nacional en cuestión que ni tan siquiera aparece ni se le conoce en su puesto de trabajo. Seguramente no, porque, claro, ya pasaron una situación apurada con el tema de los asesores de la Diputación y ¿para qué contar a los ciudadanos que un miembro de su partido en Adra está en esa situación?
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