Dramático

José Fernández

Periodista

El secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, ha dicho que debemos "desdramatizar" la próxima subida del recibo de la luz (prevista en torno al 10%) y ha animado a la gente "a aceptar las tendencias del mercado." Pues claro que sí don José Manuel. Si es que los desempleados (u "oferentes de empleo" a la griñanesca) son unos pesados que están todo el día quejándose: que si no tienen trabajo, que si no llegan a fin de mes, que si no pueden comprarle ropa a sus hijos, que si les van a quitar el piso por no poder pagar la hipoteca… ya está bien de dejarse comer la moral por todos estos intérpretes del centro dramático nacional. Pues claro que no hay que dramatizar que vayan a subir la luz. Ni que nos hayan bajado el sueldo. Ni que nuestra empresa esté sumida en un ERE. Dramatizar es de débiles, de quejicas y de flojos. Me pregunto si el señor Campa animará también a las entidades bancarias a que no se pongan melodramáticas si el personal se instala en la morosidad por no poder pagar las letras o si la propia Hacienda se dejaría de dramas y reclamaciones si en el próximo ejercicio de la Renta unos cuantos miles de ciudadanos decidimos -por desdramatizar un poco- no presentar nuestra correspondiente declaración.

En fin, creo que lo verdaderamente dramático es que tengamos en la administración pública a gente que ni tan siquiera es capaz de gestionar toda la ruina que han creado con el debido respeto y consideración. Frivolizar de este modo con los recibos de la luz cuando se es, o al menos se debe ser, consciente del nivel de emergencia social de miles de familias, resulta un ejercicio de cinismo tan reprobable como insoportable.