Los ayuntamientos, clave del cambio

Luis Rogelio Rodríguez-Comendador Pérez

Alcalde de Almería

La dirección nacional del PP, con Mariano Rajoy al frente, ha celebrado un encuentro intermunicipal en Zaragoza, para revisar con los principales alcaldes del partido el estado de los municipios y sus garantías financieras en un contexto de crisis. Se trata de un foro habitual en el que nos reunimos al menos un par de veces al año y que en esta ocasión se ha centrado en el empleo y en el resto de las necesidades actuales de España. En este sentido, me ha cabido el honor de participar en una de las ponencias del encuentro, en la que he expuesto mi punto de vista acerca de la situación financiera de los ayuntamientos en este momento de especial dificultad económica para toda España.

Los Ayuntamientos, que fueron los grandes ausentes de la política de cambios y reformas derivadas de la Transición, afrontan en estos momentos un horizonte incierto que se agrava por dos factores: la crisis económica y el sectarismo y cicatería de los socialistas a la hora de apoyar económicamente a administraciones que no les son afines. Por eso es justo que reclamemos del Gobierno y de la Junta de Andalucía una mayor financiación para que los ayuntamientos podamos asumir con garantías competencias en materias que corresponden a otras administraciones y que, sin embargo, ofrecemos a los ciudadanos porque son necesarias.

Como alcalde de Almería, estoy convencido de que las Corporaciones Locales deberían de hablarle de tú a tú al Gobierno en materia de financiación, y por eso queremos un Consejo Local de Política Financiera, para acabar así con el enorme desequilibrio que supone asumir competencias impropias llevados de la necesaria vocación de servicio de una Administración que es la más cercana al ciudadano. A lo mejor alguien pensaba que la solución a todos los problemas de los municipios iba a venir de la mano del famoso Plan E. Bueno, pues una vez demostrado que ello no es así, tal como en su día dijimos, quiero insistir en que lo que los ayuntamientos necesitan no son medidas improvisadas para poder poner carteles en cada zanja, sino iniciativas coherentes y sensatas de largo recorrido. Entiendo que ningún alcalde puede decir que no a una inversión en su ciudad, pero lo razonable es que se invierta en los ayuntamientos sin inventos, sin chapuzas y sin medidas que parecen más destinadas a generar titulares que a generar empleo. Desde el Partido Popular decimos que para paliar la crisis hace falta más rigor, y no tanta improvisación. ¿No hubiera sido más sensato y productivo bajar el impuesto de sociedades? ¿Cómo se recauda más, bajando los impuestos y manteniendo a los trabajadores que cotizan o manteniendo los impuestos y aumentar el número de parados, que, además, en vez de cotizar tienen que recibir de la administración?

Dentro de seis meses, los españoles tenemos en nuestra mano la oportunidad de empezar a poner el punto final al que, sin duda, está siendo el período político más negativo para España desde que recuperamos la Democracia. Las Elecciones Municipales del próximo mes de mayo van a suponer la oportunidad de comenzar a perfilar en los ayuntamientos de toda España el cambio de ciclo que supondrá la victoria del Partido Popular. Un cambio que significa esperanza y confianza. Y el cambio empezará por los ayuntamientos.