José Antonio Martínez Soler
Periodista
Ni los banqueros ni los políticos (que tanto les deben) se atreven a cambiar una Ley inmoral e impresentable. ¡Olé por ese juez que nos devuelve cierta confianza en la Justicia ! Ya que ni el Poder Legislativo ni el Poder Ejecutivo se atreven a cambiar la legislación hipotecaria, para frenar los abusos e inmoralidades de la banca, mientras descarga impúdicamente todo el riesgo de sus tasaciones infladas en el consumidor, está bien que sea al menos un juez quien le saque los colores a los banqueros y a los líderes políticos tan endeudados y protegidos por la banca. Entre bueyes (banqueros y políticos) no hay cornás. ¡Bravo por ese juez que nos ha dado una pizca de luz en este oscuro escándalo mayúsculo!
Tampoco los medios de información se han portado como debían con sus lectores cosumidores de préstamos hipotecarios. La prensa ha sido bastante tacaña a la hora de informar sobre la situación escandalosa que se está produciendo en España desde que comenzó esta doble crisis económica e inmobiliaria. Es cierto que la prensa vive especialamente de los ingresos por publicidad, y los anuncios de los bancos son bastante relevantes en la prensa de pago. Tan relevantes como las deudas que los partidos políticos acumulan con sus benéficos banqueros, que suelen perdonarles con el paso del tiempo, a la chita callando, cada equis años.
La noticia importantísima sobre la sentencia del juez de Navarra, a favor de que la entrega del piso salde la deuda hipotecaria, fue publicada primero por El Periódico de Catalunya. Inmediatemente fue reproducida y jaleada en Facebook y Twitter (como hacen estos días los demócratas de Túnez, Egipto, etc. con sus demandas de libertad y justicia). En Madrid la recogieron El País y El Mundo, a media página. Y ayer sábado -menos mal- pude leer en El País un amplio reportaje a doble página, que me reconcilia con ese diario, titulado: Hipoteca legal, pero inmoral.
La polémica ya es pública y a los legisladores y gobernantes (da igual del partido que sean ya que tanto el PSOE como el PP han pasado por el aro bancario) se les debería caer la cara de vergüenza si no cambian ya la legislación vigente para que quien no asuma riesgo (ni pérdida) no pueda ni deba tener beneficio. Vaya cara dura la de nuestros banqueros y políticos. Ahora que el Estado vuelve otra vez (en marzo) al rescate galante de ciertas cajas de ahorro y bancos -que han hecho mal su trabajo-, también podría aumentar sus inyecciones de capital público a los bancos y cajas que tengan problemas porque asuman sus pérdidas lógicas por el menor valor de los pisos que embargan a sus clientes morosos.
Es una buena oportunidad para cambiar una legislación inmoral (según el propio juez) y tan alejada de la Justicia como del sentido común. ¿A qué esperan?