La lista, las prisas y los tiempos

Luis Rogelio Rodríguez-Comendador Pérez

Alcalde de Almería

Mucho me temo que hay quien está intentando trasladar a Almería esa costumbre que el gobierno del señor Rodríguez Zapatero ha implantado en España, a propósito de intentar que en los medios de comunicación, en las conversaciones de café o de sobremesa, se hable de todo menos de lo que nos importa a todos los españoles.

Ya saben, en un país con cuatro millones y medio de parados, con empresas cerrando sus puertas todos los días, con cada día más personas rebuscando en los cubos de basura, infraestructuras necesarias que no avanzan y soluciones que nunca llegan, el señor Zapatero y sus compañeros de ejecutivo no cesan en la invención de falsos debates para desviar la atención. Es aquello tan manido y clásico de la ‘cortina de humo’.
Trasladado a clave local, me suena mucho a eso, el falso debate que algunos están intentando abrir, sobre si es pronto o tarde para que el Partido Popular haga pública su lista para concurrir a las elecciones municipales del próximo 22 de mayo en Almería.

Si no estoy mal informado, estamos a más de dos meses de las elecciones y al respecto del momento de presentar las listas, se me ocurren varias consideraciones. La primera es que quien debe tener prisa de verdad es quien presenta a un equipo de personas poco conocidas en política (ruego nadie tome esto como una ofensa, sino como la descripción de una realidad). En la lista del PP, la gran mayoría serán personas conocidas en la gestión política y, por tanto, el mismo día que la presentemos, el grueso de la ciudadanía tendrá claro qué candidatos proponemos para administrar la ciudad en los próximos cuatro años.

La segunda es que, una vez más, asistimos a esa manía que tenemos las personas de juzgar qué es lo más conviente para los demás, sin preguntarles a ellos y sin que ello nos implique en absoluto a nosotros. Las críticas que he podido percibir por no haber hecho pública la lista vienen, fundamentalmente, de la oposición y de algún medio de comunicación. Agradezco mucho su preocupación, pero no tengo más remedio que decirles que pueden estar seguros de que estamos marcando los tiempos en función de lo que creemos que es nuestro beneficio y el de la ciudad.

Y en tercer lugar: llevo años escuchando que las campañas electorales son demasiado largas. Y estoy de acuerdo. Hoy día, nos ponemos en campaña meses antes de que ésta empiece en realidad. Y eso supone un gasto de dinero y una pérdida de tiempo que no me parecen responsables. Por tanto, lo que quizás esté pasando, al margen de otras circunstancias que ya he comentado en público, es que en el equipo de gobierno del Partido Popular nos estamos preocupando sobre todo de gobernar la ciudad y sacar el máximo partido a la legislatura en beneficio de la ciudadanía, dejando para la campaña lo que es de la campaña.

Aún así, como ya he dicho en los últimos días, la próxima semana hablaremos de la lista, siempre según los plazos y los tiempos que nosotros mismos hemos marcado y al margen de los que nos quieran marcar los demás.