Sentir en andaluz

Pedro Ruiz

Candidato del PA a la alcaldía de Almería

Sabemos que los andalucistas en Almería somos una inmensa minoría, y por eso nuestros esfuerzos se encaminan siempre a explicar por qué hay que votar al Partido Andalucista, aunque no se sea nacionalista, convencidos como estamos de que no sólo es la mejor, sino la única opción para salir adelante. El andalucismo político no nació el 28 de febrero de 1981, tampoco nació con la II República, ni con Blas Infante, nació mucho antes, y gracias a eso tiene un cuerpo ideológico claramente diferenciado de otras opciones políticas, tanto de las centralistas, como de las nacionalistas del norte.

Los andalucistas creemos firmemente en el municipalismo, por eso desde siempre hemos abogado por la eliminación de las Diputaciones, y que sus competencias las gestione por una parte la Junta de Andalucía, y por otra, se creen fuertes mancomunidades de municipios en las comarcas naturales. De este modo entendemos que se acerca la gestión de los problemas a los ciudadanos.

Los andalucistas somos de izquierdas, sin complejos, sin ambigüedades, pero también sin extremismos. Desde el grito jornalero para el reparto de las tierras, hasta los principios republicanos, desde la reivindicación de la gestión directa de los servicios públicos, hasta la defensa a ultranza de una sanidad y una educación públicas y universales, siempre hemos estado en la izquierda, porque somos andaluces, y porque Andalucía sólo encuentra en la izquierda la solución a sus problemas.

Precisamente, esa posición es la que nos ha condenado a ir perdiendo fuerza durante algunos años, ya que ha habido andaluces que han entendido que para votar a izquierdas ya tenían al PSOE. Pero el tiempo ha demostrado el error. El PSOE ha ido perdiendo todas las letras por el camino: ha dejado el socialismo, ha dejado a los obreros, ha dejado España y lo único cierto es que está partido.

Pero más allá de esa realidad, es cierto que estamos ideológicamente próximos, pero nos diferencian cosas fundamentales. Una de ellas, la principal, es que nosotros somos nacionalistas, sin complejos y sin estridencias. Creemos que Andalucía es una nación, que es nuestro país, que tenemos el deber moral de rescatar su identidad, de llevarla a los libros de texto, de educar en los valores que nuestra historia nos enseña, y que todo eso permitirá que los andaluces nos sintamos comprometidos con nuestra tierra.

Ese compromiso supone lograr la independencia económica, que supone no ser una comunidad subsidiada por el Estado y que los andaluces no estemos subsidiados por nuestro Gobierno. Supone eso, ni más ni menos, que hacer reaccionar a los andaluces para que recuperemos nuestra dignidad, pisoteada de modo permanente.

Pues eso es lo que queremos en nuestro ayuntamiento. Queremos que los almerienses participen de verdad, que las asociaciones y colectivos se impliquen, pero también los ciudadanos a título individual, queremos apostar por la gestión directa de los servicios públicos, queremos extender los servicios sociales, así como los asistenciales y educativos, pero queremos hacerlo exigiendo a la Junta de Andalucía que cumpla con lo que son sus competencias, y queremos colaborar con ella sin enfrentamientos, porque creemos en la administración autonómica.

Sentir en andaluz en los ayuntamientos, es defender el patrimonio histórico material e inmaterial, porque esa es nuestra identidad como nación, y por eso lo defendemos más que nadie. Y creemos que esa es una de nuestras salidas económicas, como lo es la agricultura y el turismo.

Sentir en andaluz es votar en la confianza de que esos concejales o esos alcaldes, no se irán a Sevilla ni a Madrid, sino que se quedarán a cumplir con los suyos hasta el final. Y es que los andalucistas somos distintos, ¿verdad?