Esperpento

Kayros

Periodista

Esperpento es una criatura literaria inventada por Valle Inclán para pintar con trazos de brocha gorda aquella España zaragatera y triste de los años veinte. Por desgracia, aunque ya vivamos en tiempos menos feroces, todavía no hemos agotado ni el tema ni la ocasión de su empleo. Por ejemplo, la corrupción política. No parece que la ciudadanía ande precupadísima por la campaña electoral. Tampoco por las muchas inauguraciones. Ahora bien, si siguen ustedes el interés de los medios por el asunto ETA y por las ERES de Andalucía, verán que no hay temas más acuciantes como solución al terrorismo y al paro.

Viene a coincidir esta campaña electoral con el momento de más baja credibilidad en los partidos mayoritarios. Así que demos paso al esperpento. Podríamos empezar con un Camps en Baleares en actitud de leer un manifiesto contra la corrupción. ¿Quién no recuerda al fariseo en medio del templo despreciando al publicano por ser éste carne de fiscalía y de jugado de lo penal? Yo no soy como esa basura -continúa Camps-. Yo me pago mis trajes al igual que mis impuestos. Yo soy amigo de la alta Justicia y cumplo con mis deberes en el día del Señor.

En el segundo cuadro podemos ver a Javier Arenas hecho un basilisco contra Griñán. El líder andaluz del PP está convencido de haber encontrado ya las pruebas que implican a Griñán en el caso y pregunta: “¿Este asunto se ha abordado alguna vez en el Consejo de Gobierno?”. Griñán responde que no. "Pues te he pillado”, continúa un Arenas exultante, porque entre los años 2005 y 2008 existen cuatro fechas en que el Consejo de Gobierno trató el tema del ERE para una ampliación de fondos.

Pero al esperpento todavía le quedaba una traca final. El PSOE andaluz se defendió, no faltaba más. Saliendo por la tangente, la secretaria de Organización del PSOE-A, Susana Díaz, animó la bronca dando la noticia de una supuesta participación de Arenas en los procesos de contratación con las empresas de Gürtel. Oh Camps, oh jefe Correa, oh Bigotes divino, ¿podéis todos juntos contener la risa? Y por el otro lado, ¿cómo queréis ganar las elecciones? Sois el tercer problema de este país y ya vale. No me extraña que surjan agrupaciones de barrio para cuidar de nosotros.
(La Voz de Almería)