Javier Salvador
Director de Teleprensa
Parece que en esta campaña electoral los hay que se han puesto en la frente un cartel anunciando que buscan “votantes ciegos, tontos y sordos”, porque jamás he visto o escuchado tantas chorradas, seguidas unas de otras, y procedentes de partidos de todos los colores. El más activo en este campo es el PP, que parece vivir en un mundo ajeno al real, en el que sólo existe la versión que ellos mismos se cuentan demostrando que les encanta escucharse. No hay otra verdad. Así, son capaces de convocar una rueda de prensa para decir que el PSOE tiene un montón de denuncias por incumplimientos con la ley electoral, pero al mismo tiempo reparten folletos de su campaña “Me gusta Almería”, con todas las obras que han hecho en los últimos años, ya sean con dinero del Plan E o con fondos propios.
Convierten el caso de los ERE en el epicentro de la corrupción mundial, pero luego resulta que la trama Gürtel es una maniobra político-judicial para desacreditarles, y por ello no importa que los imputados e implicados repitan en las listas, porque en su versión de la realidad sólo existe aquello que ellos pueden decir y vender en los medios de su cuerda. La estrategia es clara, y no tiene más objetivo que conseguir la abstención. Los de Rajoy saben que sus votantes, aún no tragándole a él como líder o viendo en Arenas a un eterno perdedor, votarán a las siglas que sucedieron a la Alianza Popular de Manuel Fraga porque mirar hacia otro lado les produce urticaria, y en el panorama electoral no hay otros lugares donde refugiarse salvo UPyD, pero sólo para aquellos que pueden tener una mente más abierta y mayor nivel cultural que la media.
En la izquierda, que siempre ha sido reaccionaria, los votantes del PSOE están cansados de la reposición de las películas de Bambi, y no entienden ese no hacer nada, así que miran hacia más a la izquierda y su voto puede tender hacia IU, pero el problema es que mientras en la derecha los de mente abierta y mayor nivel cultural o de análisis tienden hacia UPyD como una alternativa de centro, los de izquierdas con el mismo perfil buscarán el centro de su sofá o de la toalla que se llevarán a la playa, porque no quieren participar de esta orgía de insensatez en la que se está convirtiendo este proceso electoral.
Convierten el caso de los ERE en el epicentro de la corrupción mundial, pero luego resulta que la trama Gürtel es una maniobra político-judicial para desacreditarles, y por ello no importa que los imputados e implicados repitan en las listas, porque en su versión de la realidad sólo existe aquello que ellos pueden decir y vender en los medios de su cuerda. La estrategia es clara, y no tiene más objetivo que conseguir la abstención. Los de Rajoy saben que sus votantes, aún no tragándole a él como líder o viendo en Arenas a un eterno perdedor, votarán a las siglas que sucedieron a la Alianza Popular de Manuel Fraga porque mirar hacia otro lado les produce urticaria, y en el panorama electoral no hay otros lugares donde refugiarse salvo UPyD, pero sólo para aquellos que pueden tener una mente más abierta y mayor nivel cultural que la media.
En la izquierda, que siempre ha sido reaccionaria, los votantes del PSOE están cansados de la reposición de las películas de Bambi, y no entienden ese no hacer nada, así que miran hacia más a la izquierda y su voto puede tender hacia IU, pero el problema es que mientras en la derecha los de mente abierta y mayor nivel cultural o de análisis tienden hacia UPyD como una alternativa de centro, los de izquierdas con el mismo perfil buscarán el centro de su sofá o de la toalla que se llevarán a la playa, porque no quieren participar de esta orgía de insensatez en la que se está convirtiendo este proceso electoral.
Pero ya toca ponerle freno a esto de los políticos imputados y presentes en las listas electorales, de los alcaldes a los que regalan casas y concejales que se hacen ricos sin más oficio que sus concejalías. Hay que ponerle fin a los chupópteros que se aprovechan de los cargos que ocupan en administraciones para asegurarse jubilaciones que no les corresponden, acabar con los aeropuertos por los que no vuelan aviones.
Por todo ello creo que a eso de se busca votante ciego, sordo y tonto, la respuesta tiene que ser masiva, y que cada uno coja la opción que más le guste, pero la peor conjura hacia los actuales políticos es ir a votar masivamente y responderles que frente a lo que ellos buscan se van a encontrar otra cosa, otra que no les va a gustar.
Por todo ello creo que a eso de se busca votante ciego, sordo y tonto, la respuesta tiene que ser masiva, y que cada uno coja la opción que más le guste, pero la peor conjura hacia los actuales políticos es ir a votar masivamente y responderles que frente a lo que ellos buscan se van a encontrar otra cosa, otra que no les va a gustar.
(La Voz de Almería)
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