Adra: La carretera de La Alquería

Francisco Benítez
Candidato del PAL a la alcaldía de Adra

Las disputas partidistas entre el equipo de gobierno municipal de Adra, que aún preside Carmen Crespo, y la Diputación de Almería han dado como resultado que siete años después de su pomposa inauguración siga sin solucionarse el problema de la raqueta de la carretera de La Alquería. En el punto negro de esa carretera se han producido más de 150 accidentes de tráfico, por la falta de voluntad de ambas administraciones, que extendieron su lucha partidista en varios frentes, saliendo perjudicados los ciudadanos.

Hay responsables políticos de todos esos accidentes y tienen nombres y apellidos. No les ha importado en siete años los daños en personas, vehículos y equipamientos, como farolas y jardines, por no dar su brazo a torcer. La cabezonería de unos y otros han dado un resultado costoso y lamentable. Crespo se atribuyó el éxito de la construcción de la carretera, pero ahora culpa a los técnicos de los fallos de su diseño, tratando de eludir responsabilidades, cuando muchos de los siniestros se han producido por falta de visibilidad a consecuencia de la altura de las plantas y arbustos que debe cuidar el Ayuntamiento.

Con objeto de sacar más rédito político en una obra que no era municipal, Carmen Crespo no dudó en organizar maratones y pruebas deportivas, y llevar a los vecinos hasta el lugar donde se montó uno de los espectáculos habituales de autobombo, precisamente en el punto donde se han producido tantos accidentes. Entonces la obra era mérito suyo; ahora, según ella, es culpa de Diputación. La todavía alcaldesa no puede eludir su responsabilidad, ya que en numerosas ocasiones Carmen Crespo prometió que si Diputación no emprendía las obras, lo haría el Ayuntamiento. ¿Cuántos accidentes de tráfico más hacen falta para que cumplan su promesa?

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