La hipocresía democrática del Partido Popular

Enrique Ruiz Guerrero

Responsable de Organización Local de IU Almeria

Reincidentemente hemos asistido a un episodio del nuevo ¨partido atrápalo todo ¨, el PP, con su líder Javier Arenas, que será quien promocione las nuevas reformas democráticas para garantizar que el Parlamento de Andalucía esté a pie de calle. Cuando uno escucha este tipo de declaraciones, no se puede salir de un umbral de esperpento, cuando dicen que van reducir de 75.000 a 40.000 las firmas necesarias para presentar una iniciativa popular legislativa y crearán una comisión especial de peticiones. Da la sensación que el Sr. Arenas quiere recoger las principales reinvidicaciones de la ILP que ha presentando la Asamblea de Indignados de Andalucía, erigiéndose como el nuevo partido atrápalo todo. Habría que recordarle al PP que algunos voceros a su servicio han llamado ¨guarrindignados¨ a este movimiento ciudadano que reclama justicia social, democrática participativa y medidas contra la crisis económica y han sido los principales propulsores de dichas iniciativas para avanzar en democracia participativa en Andalucía.

Para seguir hondando en mi umbral de esperpento, el PP quiere suprimir algunas defensorías del Pueblo en Comunidades como Castilla-La Mancha y Castilla y León, alegando austeridad y ahorro en las cuentas publicas, a costa de instituciones democráticas que garantizan los derechos fundamentales de la ciudadanía. Este es su autentico talento democrático.

Las defensorías del Pueblo son instituciones elegidas por los parlamentos que suponen un mecanismo para garantizar los derechos fundamentales de la ciudadanía, garantizar el buen funcionamiento de las administraciones públicas y realizar informes sobre las principales problemáticas de nuestra sociedad como puede ser la pobreza. En Andalucía contamos con una defensoria del Pueblo que es referente por su lucha y compromiso por los derechos humanos y justicia social. Chamizo realiza una labor fundamental en denunciar los abusos cometidos por la administración publica, mediar y recomendar en situaciones donde existan vulneraciones de los derechos ciudadanos y realizar informes demoledores sobre la realidad social en Andalucía, como su informe sobre los sin Techo y la Infravivienda en Andalucía.

El PP debería no obviar esta realidad y no pretender eliminar estas instituciones que ofrecen un servicio al ciudadano, garantizando un acceso a una adecuada tutela de sus derechos, sin necesidad de acudir a la justicia que muchas veces es demasiada costosa y lenta.

Puedo poner ejemplo para mostrar el talento democrático del PP allí donde gobierna, un ejemplo cercano será lo que ocurre en el Ayuntamiento de Almeria. El equipo de Gobierno incumple los acuerdos plenarios, muchos impulsados por el grupo municipal de IU relativas a la aprobación de un reglamento de participación ciudadana elaborado en un auténtico proceso deliberativo. Tampoco ha creado la comisión especial de sugerencias y reclamaciones, institución similar al defensor del pueblo a nivel local que seria una vía para denunciar todas aquellas situaciones relativas al mal funcionamiento de la administración local y vulneración de los derechos ciudadanos en el ámbito local. Comprendo que una defensoria local del ciudadano podría ser un escollo para la gestión local del PP dado que podría ser una vía ciudadana para fiscalizar la acción del gobierno municipal.

Estas medidas supondrían avanzar hacia un modelo municipal más participativo, donde los ciudadanos tengan la posibilidad de participar en la vida política como podría ser la distribución de la ciudad en cuatro distritos creando asambleas de distritos.

Desde Izquierda Unida siempre hemos demostrado que apostamos por avanzar en el modelo de participación ciudadana apostando por la descentralización de competencias en el ámbito local, presupuestos participativos, sistemas de refrendados locales para cuestiones locales y reforma de la ley electoral andaluza y estatal, eliminando el sistema D´ Hont que solo fomenta el sistema bipartidista.

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