¿Por qué eliminar las diputaciones?

Javier Ramírez

Partido Regionalista por Andalucía Oriental

Ante las recientes declaraciones de nuestros representantes gubernamentales aparecidas en diferentes medios de comunicación, así como las que se han ido produciendo a lo largo del último año respecto a la posibilidad de eliminar las diputaciones provinciales, PRAO quiere alertar a los ciudadanos sobre hechos y consecuencias muy negativos con esta intención:

1) Un cambio constitucional en la dirección de eliminar las diputaciones, únicos órganos con la potestad de encarnar a la administración periférica de la comunidad autónoma andaluza, nos llevaría a legitimar el papel de pseudoestado-centralista en que se ha convertido la comunidad andaluza, pues, apartándose del espíritu constitucional, siempre se ha apropiado de todas las competencias provinciales, "engordando" consecuentemente a una Junta de Andalucía que nunca permitió que las decisiones provinciales jugaran un papel importante en el desarrollo democrático de la comunidad.

2) La eliminación de las diputaciones provinciales, legítimas representantes de los ciudadanos a nivel provincial, sustituyéndolas por las delegaciones de las diferentes consejerías del gobierno andaluz, conlleva más centralismo al viejo modo de los gobernadores provinciales, muy lejos de la intención de descentralización que la Constitución proyecta con el Estado de la Autonomías. El Partido Regionalista por Andalucía Oriental aboga por ir en el sentido contrario: una reducción del gasto duplicado eliminado a dichas delegaciones del Gobierno autonómico, debiendo ser absorbidas en su totalidad por las diputaciones provinciales, en recursos y competencias. Si la intención es sólo una disminución del gasto público en instituciones y cargos con funciones redundantes, la mejor vía es la eliminación de las esas delegaciones, a no ser que realmente lo que se quiera es esconder una intención centralizadora.

3) También queremos alertar sobre una consecuencia que supondría tal eliminación constitucional: el definitivo cierre del mapa autonómico español, sin posibilidad de mejoras, ocultando que no son pocas las provincias que "chirrían" en un mapa de comunidades diseñadas más por interés político que regional. Esta intención por parte de nuestros dirigentes políticos muestra su alto grado de prepotencia, cuando en la Historia de los dos últimos siglos de España se han llevado a las Cortes muy diferentes propuestas regionales, con seguridad mucho más ajustadas a la realidad y idiosincrasia de las provincias que las integraban, como por ejemplo la plasmación en la Primera República Española reconociendo la Alta Andalucía (o Andalucía Oriental).

4) Sugerimos desde el PRAO que la reducción del gasto público vaya más en la línea de integrar al Parlamento andaluz con las diputaciones provinciales, cogiendo éstas las capacidades legislativas que garanticen una verdadera defensa de los intereses provinciales. Afirmamos que el ciudadano entiende lo que se legisla desde una institución cercana y no desde un gobierno lejano como el que representa la Junta de Andalucía. Para nuestro partido, también es necesaria una reducción del gasto redundante en todas las administraciones, y nuestra propuesta está también por exigir eficiencia frente a despilfarro, la desorganización de las instituciones públicas o la mala gestión del partido de turno que gobierne.