Debido a los últimos acontecimientos vividos en el PSOE de Almería, fruto de la mala gestión realizada desde su dirección provincial en los últimos años, nos hemos visto en la necesidad y obligación de hacer un llamamiento a todos los militantes de base y afiliados a este partido, que, sin duda alguna, de no cambiar su rumbo perderá sus históricas siglas de identidad en las calles, como se viene apreciando en las dos últimas elecciones. Cierto es que la crisis económica y el número de parados no han ayudado nada a nuestro partido en las urnas, pero esto debe tratarse a nivel nacional, a nosotros ahora nos concierne lo que ocurre aquí, en nuestra provincia, donde el batacazo electoral no solamente ha sido producto de los problemas económicos que atraviesa nuestro país, a pesar de que Diego Asensio, Martín Soler y Juan Carlos Usero piensen lo contrario.
Creemos que todos nos hemos encontrado ante el mismo dilema: somos socialistas pero a veces no nos sentimos identificados con la forma de actuar de nuestros dirigentes, supuestamente navegantes de la misma corriente ideológica nuestra. Hoy en día, y como muchos hemos podido comprobar en nuestros barrios, pueblos, ciudades, trabajos o universidades, parece que ser del PSOE está mal visto y es algo que sería urgente analizar. Desde aquí, desde la militancia pura y dura, hemos visto como desde diferentes cargos ocupados por personas que también tienen su carnet socialista no se ha hecho otra cosa que luchar por intereses propios y metas personales ambiciosas, no en ideas sino en dinero, que quedan muy lejos de lo que significa defender el socialismo.
Es intolerable que exista tal compadreo en el PSOE de Almería que esto se haya convertido en el cortijo de unos pocos cuando debería ser la casa de muchos. Es intolerable que en la Junta de Andalucía haya personas a las que sería difícil etiquetar como socialistas. Muchos, a veces, no sabemos si esas personas de las que hablamos son del PSOE o del PP, personas que utilizan este partido no como un camino para hacer una política honrada y verdadera que ayude al pueblo, sino como un tren de alta velocidad para ganarse un puesto a toda costa y vivir del cuento. Y luego, a meter a sus novios/as, hermanos/as o familiares, para que todo quede en casa y nadie pueda desestabilizar sus planes de enriquecerse en un sillón mientras los militantes de base, los que tenemos que defender en las calles a este partido porque nuestros líderes no salen de sus palacios, seguimos preguntándonos si merece la pena seguir aquí, bajo estas siglas. La respuesta es sí, y ahora más que nunca.
Tras las dimisiones, por llamarlas de alguna manera, de la hasta hace poco Ejecutiva Provincial, parece que se ha abierto un camino de esperanza para todos los que creemos que esta manzana que ya olía a podrido aún tiene remedio. Y lo tiene, pero no podemos caer en el mismo engaño. Se avecinan semanas duras en las que los bailes de un lado a otro ya se están produciendo para ocultar culpabilidad o simplemente un error de decisión. Ahora llega una Gestora en la que hay muchas caras conocidas, muchas debido a su gran labor al frente de su cargo y otras, por desgracia, por sus continuas apariciones en televisión o prensa, únicos lugares en los que se las daban de socialistas por llevar una chapita con la cara del candidato.
La lucha por la libertad de las personas, la justicia y la igualdad no solamente debe tener como escenario los medios de comunicación, nuestra lucha deber ser las 24 horas del día, porque ser socialista no es un trabajo o una oblicación, no es una oportunidad para ganar dinero fácil y conseguir fama, sino una forma de vida, una pasión. Y nuestra forma de ser y pensar debería empapar a todos aquellos que nos rodean diariamente, en cada casa, en cada calle o barrio, en cada trabajo, escuela o cafetería. El verdadero socialismo es la voz de los ciudadanos implicados en la lucha por acabar con las injusticias y por hacer de este mundo un sitio mejor, no el que muestra un hombre de traje Armani o una mujer vestida de Chanel cuando su agenda le obliga a hacer el paripé delante de las cámaras.
Llegados a esta reflexión se hace inevitable plantear un cambio drástico en nuestra organización y reconocer que el problema se encuentra en las altas esferas. En este partido siempre se ha valorado el trabajo de todos aquellos que en tiempos pasados, cuando manifestarse era considerado un crimen, lucharon por la libertad. Esas mismas personas luego pasaron a ocupar cargos políticos importantes y con el tiempo la mayoría, quizás por encontrarse en un sitio cómodo o por que su nómina crecía sin parar año tras año, empezaron a despojarse de sus valores iniciales, abandonaron la lucha y se dejaron atrapar por un comportamiento burgués, haciendo que el clasismo se conviertiese en un huésped habitual de un partido nunca le tendría que haber abierto la puerta.
Es ahora nuestra obligación ponernos manos a la obra para renovar este partido en la provincia de Almería, derribar los viejos muros que nos encierran en una parcela de actuación escasa. A los militantes de base no se nos tiene en cuenta, solamente nos quieren cuando hay que repartir propaganda dos días antes de las elecciones y para votar. Pero nosotros somos poderosos. Todos nosotros, al igual que el pueblo llano en cualquier país. Somos los obreros, estudiantes, fontaneros, profesores, médicos, artistas o taxistas de nuestro partido, los que hacemos que todo se mantenga en pie y el engranaje encaje para un funcionamiento correcto. Pero YA BASTA.
Porque siempre lo hacemos sin ánimo de lucro, desde la humildad, y con buena fe, para defender en lo que creemos, pero ahora no nos sentimos identíficados con la gente para la que hacemos esa labor y debemos cambiar eso. No se trata de quitar a los que están para ponernos los que nos quejamos, eso debe quedar claro. Queremos que este partido lo lideren personas honradas que verdaderamente muestren los valores del socialismo. Ese momento ha llegado y en nuestras manos está que la renovación llegue al PSOE de la provincia de Almería. No queremos los mismos perros con distintos collares, tenemos que derribar todos los muros que sean necesarios para que los que somos militantes de base recuperemos la esperanza en este partido y, lo que es más importante, que de esa esperanza se contagien nuestros simpatizantes y ciudadanos de izquierdas para los que ahora mismo PSOE y PP les suena a lo mismo.
Ahora no es momento de dar marcha atrás y cabrearse, no es momento de abandonar porque todo parece estar perdido, es momento de indignarse y al igual que se llenan las plazas de toda España, llenar nosotros nuestras agrupaciones, no para proponer el cambio, sino para exigirlo. Si miramos a esta sociedad, su situación actual, no nos invita a imaginar un mundo mejor con este panorama, pero de todos es sabido que todo tiene un final, al igual que un principio, y ahora se abre para todos nosotros un camino, duro, pero esperanzador en el que seremos los protagonistas de un cambio sin precedentes que hará de este partido, sin duda alguna, el partido que todos los que sueñan con cambiar el mundo quieren. Este es un pensamiento global, pero la actuación debe ser local.
Todos queremos sentirnos orgullosos de dar nuestro voto al PSOE en unas urnas, hacerlo sin miedo y sin remordimiento de conciencia, sin estar obligados, sino con gusto. No fue el caso de las últimas elecciones locales. Muchos hablan ahora de lealtad, pero a los militantes de base no se nos puede exigir lealtad si se nos mira por encima del hombro y se nos engaña, si se nos utiliza no tienen derecho a pedirnos lealtad, tienen el deber de pedirnos perdón.
No sabemos como pueden considerar a este escrito en las altas esferas del PSOE, quizás un gesto de rebelión o de revolución. Pero pase lo que pase, dejamos claro que lo hacemos por el bien de nuestro partido y por el futuro de esta sociedad, no por nuestros bolsillos. Siempre hay que dar ejemplo de austeridad. Es por todo esto y mucho más por lo que queremos invitar a todos y cada uno de los militantes de base o afiliados, también a nuestros simpatizantes, a unirse a esta plataforma de reflexión y participación en busca del rumbo que necesita el PSOE, ese rumbo que nuestros dirigentes no saben encontrar sin pensar antes en sus intereses propios. Todos juntos haremos una voz más fuerte.
¡Por un PSOE real YA!
La verdad es una lastima que un gran partido termine de esta forma, después de las municipales lo mas idóneo debería ser la unión de todas las centrales de la provincia para buscar soluciones en bien del partido, pero mas pudieron las ambiciones personales de aquellos personajes que fueron elegidos concejales,,por desgracia,, ya que por interés propio traicionaron a su partido naciendo pactos con el mismo partido que los humillo contundente mente a nivel nacional, quien entiende esto, escogieron mal a estos candidatos basura que hoy se vendieron al bando contrario, y deberían ser expulsados del partido pero ya,,,
ResponderEliminarNo solo a los Candidatos que han traicionado a los votantes y a las bases....yo propongo la invitación de que entregen el carnet los afiliados que han traicionado a su propio partido.
ResponderEliminarLos que nunca hemos cambiado de chaqueta ni en los tiempos buenos como en los malos, somos a mi modesto entender quienes tenemos que depurar y reflotar nuestro partido.
En Mojacar concretamente.... hemos tenido que luchar contra, la ambición del PP.e incluso defendernos de algunos de "los nuestros de toda la vida" que al verse frustradas sus ambiciones de poder en el Ayuntamiento no han dudado en pedir el voto para otras formaciones.
Aún así, no nos hemos dados por vencidos...hemos interpuesto una demanda ante la Fiscalía y hemos conseguido paralizar la composición del nuevo ayuntamiento en base a las multiples irregularidades que hemos detectado.
Y lo que mas ánimos nos da... es que a pesar de todo esto hemos conseguido representación en el Ayuntamiento que no teníamos en la legislatura anterior con un concejal y a la espera de la resolución de la Fiscalía, pues en caso de repetir al menos las votaciones en una mesa, con solo 9 votos quitariamos la la mayoría al PP y tendriamos dos concejales.
No todo está perdido, los que seguimos siendo honestos y poco a poco podemos cambiar esta situación.
José Hernández PSOE Mojacar.
tienes razon, tu siempre usas las plabras justas.en el partido socialista de mojacar tambien haria falta hacer alguna limpieza,osea,aquellos que han utilizado un doble perfil,que han aparentado ser fieles al psoe y sin embargo no solo han votado a otros partidos sino que han celebrado la victoria del PP deben salir pero antes entregar el carnet.Cuando uno cree en la ideologia de su partido debe apoyarlo en lo bueno y sobre todo en lo malo y ayudar a levantarlo cuando las cosas van mal.En este puto pueblo, lo malo es que cuando hay intereses personales algunos se venden ya sea por 200 euros o por una nomina,pero yo sigo adelante,comere pan y cebolla si no hay otra cosa pero no me vendo, y mucho menos al PP.A ver si alguno de IU toman nota¡.
ResponderEliminarusted no sabe ni lo que dice. Este partido está condenado. El único pueblo que ha ganado dos concejales en toda la provincia y lo miran como una mierda los propios suyos. El partido socialista es el mayor lastre que tenemos los hombres honrados de centro izquierda; me da verguenza hasta mencionar la palabra psoe.
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