Lo de Palomares es para resucitar a la duquesa

Paco Campos García

Doctor en Filosofía y Profesor de la UAL

Fraga con el meyba subido hasta el ombligo y rodeado de gente de bigotillo y pelo chapado para atrás, todos en el agua mirando a la cámara y desafiando a la opinión científica con un ‘aquí no pasa na’. Casi medio siglo después, hoy hay todavía cincuenta mil metros cúbicos de tierra contaminada con plutonio. Y ahora dice la Hilary que Obama se está tomando en serio lo de Palomares.

Cuando lees todo esto y haces memoria y compruebas cómo todos esos paisanos nuestros han estado todo este tiempo viviendo con peligro, y sus cultivos y bancos de pesca impregnados de radioactividad, cuando ves a la siempre sonriente Trinidad, ministra de Exteriores, diciendo que se ha desplazado un equipo técnico (cuatro o cinco paseando por el campo) y que trabaja en ello, cuando piensas que esta situación no hubiera durado en el caso de Madrid, Cataluña u otra zona cualquiera de España, y que aquí se ha encarcelado, prohibido y censurado a los que han querido hacer ver su protesta y que se ha golpeado a los agricultores que en su día salieron con Isabel Álvarez de Toledo a la calle… cuando pasas revista a lo acontecido, es cuando te das cuenta de lo mierdoso que es nuestro país, con esperpentos como Fraga y con incapaces e insensatos como han sido con nosotros todos los jefes de gobierno y todos los presidentes de Andalucía (no veas si las bombas hubieran caído en Matalascañas y los sevillanos no hubieran podido ir a la playa, no veas).

Obama se lo está tomando en serio; ¡y una mierda para Obama! Qué razón tenía Valente: ‘provincia irredenta’, escribió para toda España. Almería, con un PSOE pendón y ventajista, que se ha preocupado sólo de colocarse y poner la política a los pies de los caballos; gente sin escrúpulos que todavía quiere más y se apoya para ello en la fe socialista. Un partido que vive del cuento y ha dejado la alfombra roja para que el neofranquismo liberaloide del Pepé se pasee bajo palio. Qué podemos esperar con este panorama, qué pueden esperar los vecinos de Palomares.