¿Piensa Zapatero en un adelanto electoral?

José Pérez Blánquez

Exalcalde de Canjáyar

Las piezas que ha movido últimamente así lo indican, pero creo que muchos se equivocarán en ese razonamiento, pues sólo y exclusivamente lo hará si beneficia a su partido,  y es muy lógico que así sea. Ningún presidente de la democracia ha convocado elecciones anticipadas porque fueran beneficiosas para su país. Todos, absolutamente todos, han hecho adelantos, bien porque no hayan podido gobernar, bien por falta de mayorías o apoyos puntuales para aprobación de los presupuestos o la aprobación de leyes fundamentales. Pero, repito, según los archivos de las hemerotecas, solo ha sucedido en contadísimas ocasiones, el resto de convocatorias han sido en función de los intereses de partido. En esta ocasión creo, según la información que manejo, que sólo se harán a favor del partido. ¿Por qué digo esto? Pues por lo siguiente:

Primero: No se debe dejar transcurrir demasiado tiempo como para quemar al candidato propuesto, Sr. Rubalcaba, pues éste, al día de hoy, tiene un currículo lo suficientemente bueno como para que no necesite tiempo para darse a conocer o desgranar sus propuestas de gobierno, pues entraría en contradicciones innecesarias y poco ventajosas para sus aspiraciones electorales, ya que lleva mucho tiempo en el gobierno y  él ha votado favorablemente todas y cada una de las leyes aprobadas en los últimos tiempos, las cuales tienen poco o nada de socialdemocracia  como para poder venderlas como emanadas de un partidos de izquierda moderada.

Segundo: La permanencia en el tiempo llevaría consigo la aprobación de los presupuesto para 2012, algo que le saldría muy caro al actual gobierno, pues sólo encontraría apoyo en los nacionalistas vascos,  los cuales venderían su apoyo muy caro, es decir, exigirían altos y costosos traspasos de competencias al gobierno vasco, algo que si se hace ya no tiene vuelta atrás, es decir, ya no se le podrían quitar esos beneficios que supondrán la cesión de impuestos clave, con el agravante de que las comunidades autónomas reclamarían, en tromba, las mismas competencias.  Pienso que ni Zapatero ni Rubalcaba estarían dispuestos a correr con ese gravamen tan grande, pues en política todo se paga, antes o después, pero siempre los errores terminan pasando factura.

Tercero: Tanto este trimestre como los siguientes serán positivos para el empleo y eso también cuenta, pues no es lo mismo convocar elecciones con 200.000 parados menos que con 200.000 parados más. Igualmente podríamos decir de la deuda del Estado, pues por el momento parece que podríamos llegar a final de año con el 6% de deuda PIB, algo que no está tan claro si nos situamos en el mes de marzo de 2012, fecha en la que no tenemos certeza que se llegue con ese índice de endeudamiento. Tampoco debemos olvidarnos de los presupuestos, pues éstos, muy posiblemente, deban llevar aún más recortes sociales que los actualmente en vigor.

Por estos conceptos simples e inteligibles para todo el mundo se puede asegurar que las elecciones generales serán entre los meses de octubre o noviembre del corriente año.