Simón Ruiz
Periodista
No viene tanto a Almería como Javier Arenas, presidente del Partido Popular de Andalucía, pero muchos empiezan a considerarlo como un “clásico” en las campañas electorales en la provincia. Mariano Rajoy, líder nacional del PP, se ha convertido en un fijo. Quizá sea por la importancia estratégica a nivel electoral que tiene Almería en el contexto andaluz o por la amistad recíproca con el presidente provincial del PP, Gabriel Amat, lo cierto es que Mariano Rajoy tiene parte de su mirada política centrada en Almería. Lo recordó ayer el presidente nacional del PP a su llegada al Área de Alcaldía del Ayuntamiento de Almería, donde el regidor, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, ha ganado unas municipales por tercera vez consecutiva. “Creo que se han hecho las cosas bien y por eso estamos legítimamente orgullosos del apoyo y de la confianza que nos ha dado la gente”, dijo el líder popular, no sin antes felicitar a sus compañeros de partido por los éxitos electorales tanto en la capital como en la Diputación y en medio centenar de municipios almerienses.
En particular la felicitación la personificó Rajoy Brey en Luis Rogelio Rodríguez-Comendador y en Gabriel Amat, reelegido alcalde de Roquetas y nuevo presidente de la reconquista Diputación Provincial. El alcalde capitalino ya no precisa de socios de gobierno y a nivel provincial el PP ha alcanzado su más alta cota electoral en unas municipales: casi 150.000 votos y 18 representantes en la Diputación. En términos porcentuales la ventaja ha sido de 20 puntos sobre el Partido Socialista.
Quien dentro de unos meses se enfrenta a su tercera carrera electoral hacia la Moncloa es consciente de que éxitos como el de Almería no caen del cielo como la lluvia. “Aquí -explicó- se ha hecho un gran esfuerzo, un esfuerzo que no ha sido de 15 días de campaña, y se ha trabajado mucho con los almerienses”, A esos valores de los candidatos populares, Rajoy sumó la “cercanía” de éstos hacia los ciudadanos. Los 150.000 votos recogidos en las urnas por el PP en las urnas en los pasados comicios del 22 de mayo han de ser “recompensados” con una “respuesta” politica a “esa confianza”. “Vamos a hacer lo posible y lo imposible para estar a la altura de las circunstancias. Sabemos que un voto es algo muy serio, en el fondo es una decisión personal e individual”.
El presidente nacional del PP, acompañado de Amat, Arenas y Rodríguez-Comendador en su encuentro con los medios de comunicación en lo que hace décadas fue el Preventorio de Almería, vino a decir también que no está todo hecho. Que los 150.000 votos de las municipales han de incrementarse en las próximas citas electorales de Madrid y Sevilla. “Vamos a gobernar para todos y vamos a trabajar para ganarnos su apoyo también en el futuro”.
Que sean en otoño de 2011 o antes de la primavera de 2012 las elecciones generales no es algo que dependa personalmente de Mariano Rajoy sino del socialista José Luis Rodríguez Zapatero. En cualquier caso, el presidente del PP ya recordó ayer en Almería que en Génova -sede nacional- ya se trabaja con la hipótesis de un adelanto. “He venido -explicó- a preguntar lo que deben ser los objetivos más importantes del PP en el futuro, lo que debemos incluir en nuestro programa electoral”.
Pero no le bastó a Rajoy con llevarse en su cartera las nuevas promesas sobre agua, autovías o trenes de alta velocidad referidas a esta provincia. Según indicó, en su periplo provincial también aspira a escuchar “planteamientos generales” de lo que “la gente” quiere para España. Planteamientos generales para un país sumado en una crisis económica profunda y con cifras millonarias de parados. No se cansa de repetirlos Mariano Rajoy. Su visita a Almería no iba a ser una excepción. “Trabajaré por el crecimiento económico y la creación de empleo”.
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