Festival de Cortos

Juan Torrijos

Periodista

Sería una incongruencia por mi parte estar en contra del festival de cortos de la Diputación Provincial, pues he disfrutado a tope de algunas de sus ediciones con mi querido Ignacio Flores y demás compañeros de cultura. Pero ante la situación en que viven actualmente muchos de nuestros pueblos y la polémica levantada entre los políticos por la propia existencia de la institución provincial, en algún momento (cuanto antes es de desear) se tendrán que plantear las reales y necesarias competencias de la Diputación para con los ciudadanos almerienses.

Si, como se ha venido diciendo y se quiere mantener, Diputación “es el gran ayuntamiento de los pequeños ayuntamientos”, algunos de los proyectos tendrán que ser replanteados de cara al futuro. Y entre ellos, evidentemente, está el festival de cortos. No me gustaría que desapareciera esta ventana abierta al mundo del cine, ha sido muy importante en la promoción de Almería, pero no puede ni debe caer sólo sobre unos dineros que deben estar para cubrir las necesidades de los pueblos de menos de veinte mil habitantes.

En tiempos de crisis como los que vivimos todo se replantea, y las administraciones deben buscar la forma y manera de no solaparse las unas a las otras, que es lo que ha venido ocurriendo durante los pasados treinta años, para alegría de políticos -malgastosos-. Espero y le deseo un gran éxito al festival para la edición actual, pero le va a ser muy complicado al presidente de la institución negar a los pueblos ayudas en sus necesidades básicas, y son muchas las que padecen y conoce don Gabriel Amat. Y ahora a disfrutar del festival y a pensar el futuro.
(La Voz de Almería)