La máquina de decir pamplinas

Juan Carlos Blanco
Director Adjunto de El Correo de Andalucía

No me había dado cuenta hasta ahora, pero lo acabo de captar: hay una conspiración interna en el PP de Madrid para acabar con las aspiraciones de Javier Arenas en Andalucía. Por aguna razón que se me escapa, Ana Mato y González Pons han decidido: 1) que no necesitan los votos andaluces para lograr la mayoría absoluta y 2) que hay que empezar a segar la aspiración de Arenas de hacerse con San Telmo. Suena un tanto delirante, pero es que no hay otra alternativa. O es esto, y el líder andaluz tiene que cuidarse de los suyos, o es que alguien se ha vuelto loco en la calle Génova de Madrid y ha puesto a funcionar la máquina de decir pamplinas.

Lo último entra con galones en ese concurso del disparate en el que se han enzarzado el PP y los catalanes de CiU a cuenta de Andalucía. La señora Mato, a la que no le consta que a su marido le hayan regalado un Jaguar los de la Gürtel, sigue dale que te arreo en su papel de azote de la educación andaluza. Hace un par de años, nos avisaba de que los niños andaluces eran analfabetos. Gracias al aviso se pudo corregir esta pequeña deficiencia, pero atenta como está a todo lo que ocurre al sur de Despeñaperros, ahora nos alerta de que González Pons tenía razón cuando nos advertía hace un mes que en los colegios no hay pupitres y nos recuerda con pruebas documentales que los niños de Andalucía andan tirando por los suelos.

Lástima que la foto que aporte para denunciar esta tropelía propia de gobiernos norcoreanos sea ¡¡¡la de unos niños sentados en el suelo durante un taller de cuentacuentos¡¡¡ Con estos amigos, ¿para qué necesita Arenas tener enemigos?

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