Almería y el reparto de la tarta

Manuel López Jerez

Consultor

Son muchas las personas del ámbito profesional, social, político y empresarial que, con su buena intención, me han aconsejado que me marchara de Almería. Consideran que teniendo en cuenta la idiosincrasia almeriense, de quienes están en posiciones de poder en los diversos ámbitos sociales, mis propuestas profesionales no interesan. Nunca se me olvidará que un sindicalista, que tuvo responsabilidades orgánicas en un sindicato, me orientara en la misma dirección que algún empresario. Coincidía en que tenía que marcharme para ofrecer mis servicios de consultoría estratégica en recursos humanos y organización en otras regiones.

Me informó el señor sindicalista que en Almería había unos “lobbies” que repartían la tarta. Mi sorpresa fue tal que en ese momento diagnostiqué un grave problema de infraestructuras mentales en mi tierra. Un problema que, a diferencia de las infraestructuras materiales, nadie presta atención, y además quienes lo detectan piensan que forma parte de nuestra historia, y que no tiene solución.

¿Ahora te enteras de cómo es Almería? Me comentan muchos almerienses con responsabilidades en distintos sectores y ámbitos. “Almería es así”, me confirman. Y yo les comento que ,como he estudiado la historia de mi provincia, entiendo determinadas carencias en cuanto a nuestros planteamientos económicos y socio-laborales, pero que en pleno siglo XXI no es de recibo que no cambiemos, aprovechando la gran ventana al mundo que es Internet y toda la información que recibimos de tantos lugares.

Quizás tengan razón, y Almería sea así: que pasa del primer lugar al último en creación de empleo. Posiblemente los lobbies de Almería no tengan interés en el elevado número de desempleados que tenemos en nuestra provincia. A aquellos que quieren mejorar y cambiar las infraestructuras materiales no les interesa que cambien las infraestructuras mentales de la provincia para modernizarlas y acercarlas a las que hay en otras provincias españolas europeas.

Siempre he apostado por mi tierra. Por eso no me marché a Madrid, aunque emigro en formato online a muchos lugares de España y del mundo, donde valoran y aprecian mis planteamientos profesionales, reflejados en mis escritos. Así por ejemplo, la Agencia Vasca de Innovación, además de publicar mi libro Lenguaje transparente. Relaciones interpersonales en la empresa, lo divulgan en las redes sociales. También el portal de empresarios de Navarra navactiva.com publica todos los contenidos que les envío.

La situación en nuestra tierra es muy grave y requiere de menos lobbies egocéntricos y ambiciosos y más profesionales con nuevas ideas y comprometidos con la sociedad almeriense.