Almería duplica el número de empresas insolventes

Manuel León
Redactor-Jefe de La Voz de Almería

Las cifras cantan: 2011 volvió a ser un ‘annus horribilis’ para las cuentas de resultados de las empresas. Se agravó la falta de liquidez y 45 firmas han tenido que atravesar el desolador trance de entrar en fase concursal (suspensión de pagos). Almería, en términos relativos, ha presentado el peor comportamiento entre las provincias andaluzas en declaración de empresas insolventes. La provincia ha visto crecer esta nómina de empresas en apuros en un 137% en solo un año. El peor año hasta ahora en este desacreditado ránking fue 2008 cuando 29 empresas entraron en procedimiento concursal en la provincia.

La crisis no va por barrios, sino que lastima a todos los sectores en conjunto, desde la promoción inmobiliaria, a la agroindustria, academias de idiomas o empresas municipales. La mayor incidencia de declaraciones concursales en la provincia ha llegado, sobre todo, en el último trimestre del año, según los resultados del Baremo Concursal de PriceWaterhouseCoopers, a partir de los datos extraidos del Boletín Oficial del Estado y del Registro Mercantil. La estadísticas, a la postre, se han convertido en el mejor termómetro para medir la situación económica de Almería: frente a los mensajes más o menos amargos o edulcorados de los últimos meses, emerge la rotundidad de las cifras. Y tras un espejismo de aguas mansas a finales de 2010 con descenso de empresas concursadas, la marejada ha vuelto a hacerse visible al concluir 2011 con unas límitaciones crediticias paras las pymes cada vez más evidentes.

Respecto a otras comunidades, Andalucía es la cuarta por volumen de empresas con incapacidad para afrontar los pagos, con el 11% del total. La primera es Cataluña, seguida de Valencia y Madrid. Dentro de la región, Almería ha sido la que más ha destacado en crecimiento de empresas insolventes, aunque, en cifras absoluta, Sevilla y Málaga, se llevan la palma con 169 y 139 procesos concursales respectivamente. La mayoría de los concursos se han abierto en el juzgado número uno de lo Mercantil en Almería de forma voluntaria y en menor medida a instancia de algún acreedor. Con ello, las empresas buscan una solución a medio plazo a su falta de liquidez negociando una quita con los acreedores, antes de llegar a un proceso de quiebra y embargo. Los convenios con los acreedores implican una reestructuración patrimonial y la posibilidad de salvar la empresa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario