Caricaturas de hombres

Mar Verdejo Coto

Paisajista y Urbanista

“Si lo llego a saber, me opero las tetas en lugar de hacer un máster”. Es uno de los eslóganes que podíamos ver en las manifestaciones del 15-M y porteado por una joven. Refleja uno de los dramas que estamos viviendo en nuestra sociedad. Hemos creado un mundo sin esperanza ni atisbo de ella, en la que se premian otros valores, y no la preparación, cultura, tesón, creatividad,  acción, compromiso...de la juventud de nuestro país. Y estas van a ser las claves para rediseñar el futuro.

Andan por ahí diciendo, tras las elecciones andaluzas: ¡Qué ya se pasó el miedo! ¿De qué miedo hablan los unos y los otros?, ¿miedo a qué? Dándole vueltas y empatizando un poco, imagino que se refieren a no perder sus prebendas y privilegios para ellos, familiares y amigos,  y no a construir un futuro mejor para todos, con más derechos, equidad y justicia social. ¿Pero qué futuro nos están dibujando  estos días los gobernantes y representantes políticos de los partidos tradicionales?.Estas declaraciones si qué dan miedo, terror dantesco, más bien.

‘La libertad de maternidad hace a la mujer auténticamente mujer”, palabras de nuestro Ministro de Justicia, Alberto Ruíz Gallardón del PP. ¿Cuándo se van a enterar de lo siguiente? No necesitamos ser madres, ni lactantes, ni medias naranjas para ser y sentirnos auténticas mujeres. ¿Qué sabrán ellos, los hombres, lo que necesitamos para sentirnos plenas? Y esto, de un hombre, que se le considera lo más progre en un partido ya muy rancio. ¿Qué se espera de un partido en el que hablan de peras y manzanas cuándo se refieren a la pluralidad de sexos?

Y, ¿cómo anda el tema en los partidos llamados progresistas?. Pues no  se quedan muy retrasados en comentarios. El candidato y coordinador de IULV al Parlamento andaluz hace  las siguientes declaraciones: “¿sabes que está la de las tetas gordas en educación?”, al referirse a la delegada de Educación de la Junta de Andalucía. En este partido las mujeres abanderan los colores morados, lilas, o los que sean, alzan el puño en alto, y declaran que ni un paso atrás en los derechos conseguidos para la igualdad entre géneros. ¿Cuánto desprecio hacia la mujer y su femineidad hay en estas diez palabras? ¿Se puede ser más soez, machista y misógino en unas declaraciones de un representante político de los llamados más progresistas? Puede que sí, pero no los queremos como representantes de nada, ni tan siquiera que abanderen la equidad entre géneros, no quiero ni que perfilen el dibujo del futuro.

Hay que transformar la sociedad, con libertad, igualdad y sostenibilidad. Es necesaria una transformación radical del modo de pensar y vivir, apelar al raciocinio, facultad exclusiva de nuestra especie, el Homo Sapiens. El futuro yo lo veo con valores femeninos que hemos perdido como la habilidad emocional, la inteligencia intuitiva, la resistencia femenina, el esfuerzo, la solidaridad,… y estos señores no contribuyen a nuevas formas de ver el mundo y estar en él.

Yo aún estoy esperando el pronunciamiento de las abanderadas del color violeta, las que dicen que ni un paso atrás en libertad, igualdad y sostenibilidad en temas de la mujer, se ha luchado mucho para ahora callar. No nos ayudáis con vuestro silencio. Ni con vuestro lenguaje caricaturesco del lenguaje masculino.

 Es lo que más me preocupa de todo, la idolatría a referentes ¿masculinos?, que tan sólo son una caricatura de los hombres, no son ya clave para la política del siglo XXI. Al final todos están asomando la patita por debajo de la puerta, pero señores, ¡ya no nos dan miedo!, eso lo dejo para los cuentos infantiles. ¡Ah!, por cierto, como los veo un poco despistados en temas femeninos, nos sentimos mujeres con pleno derecho: con o sin tetas.