Juan Carlos Pérez Navas
Senador del PSOE por Almería
"En cuanto haya un Gobierno del que la gente diga 'me puedo fiar' comenzará la inversión y la recuperación". Cien días después de la toma de posesión del nuevo Gobierno, aquellas palabras que Rajoy pronunció allá por noviembre, en plena campaña electoral, resultan reveladoras. En sus primeros cien días, el Gobierno del PP, lejos de generar la confianza que prometió, ha provocado el desánimo de los ciudadanos y la incertidumbre de los mercados. Al recorte sin precedentes de derechos, el más duro de la historia democrática de España, se le han sumado los efectos de una política económica que en nada se parece a la que prometieron para llegar al poder.
Frente al milagro de la recuperación que iba a producirse -según nos dijeron- gracias al cambio de Gobierno, hoy tenemos un país con grandes dificultades económicas. La herencia recibida, ésa a la que tanto alude Rajoy para justificar sus recortes, era un país que el año pasado creció un 0,7%. Ahora, el propio presidente anuncia que en 2012 entraremos en recesión, con un decrecimiento del 1,7%, y que 2013 no será mucho mejor. Con este panorama, la prima de riesgo española se ha disparado y la confianza de los consumidores ha caído 13 puntos.
Donde el Gobierno iba a crear empleo, hoy tenemos el anuncio de que en 2012 habrá 630.000 parados más. En Almería, con la subida de marzo ya hemos superado los 80.000. Aunque Rajoy prometió que no subiría impuestos, ha aprobado una de las mayores subidas de las últimas décadas, castigando, especialmente, a las clases medias y trabajadoras. Y a pesar de que dijo que no abarataría el despido, ha creado el despido gratis para los empleados con menos de un año de antigüedad, dentro de una reforma laboral que deja a los trabajadores a merced de la voluntad de los empresarios.
Ahora que se ha destapado lo que ocultaban esos Presupuestos Generales que con tanto celo guardaba el Gobierno hasta después de las elecciones andaluzas, tenemos nuevas razones para desconfiar. Nunca, hasta ahora que la han aprobado, el PP había hablado de su intención de hacer una amnistía fiscal para premiar a los defraudadores. Y, aunque prometían que, con ellos en el poder, España no rendiría cuentas a nadie, le han presentado los Presupuestos Generales del Estado a un enviado de Angela Merkel, antes de llevarlos al propio Parlamento Español. En definitiva, ahora que ha llegado al poder, el PP está haciendo lo contrario de lo que prometió. La noche en que ganó las elecciones, Rajoy dijo que nadie tenía que sentir "inquietud ninguna". Pero con una situación como la actual, donde la vida es más cara, el empleo más precario, los impuestos más altos y las perspectivas de recuperación nulas, es difícil seguir creyendo en el milagro.
Frente al milagro de la recuperación que iba a producirse -según nos dijeron- gracias al cambio de Gobierno, hoy tenemos un país con grandes dificultades económicas. La herencia recibida, ésa a la que tanto alude Rajoy para justificar sus recortes, era un país que el año pasado creció un 0,7%. Ahora, el propio presidente anuncia que en 2012 entraremos en recesión, con un decrecimiento del 1,7%, y que 2013 no será mucho mejor. Con este panorama, la prima de riesgo española se ha disparado y la confianza de los consumidores ha caído 13 puntos.
Donde el Gobierno iba a crear empleo, hoy tenemos el anuncio de que en 2012 habrá 630.000 parados más. En Almería, con la subida de marzo ya hemos superado los 80.000. Aunque Rajoy prometió que no subiría impuestos, ha aprobado una de las mayores subidas de las últimas décadas, castigando, especialmente, a las clases medias y trabajadoras. Y a pesar de que dijo que no abarataría el despido, ha creado el despido gratis para los empleados con menos de un año de antigüedad, dentro de una reforma laboral que deja a los trabajadores a merced de la voluntad de los empresarios.
Ahora que se ha destapado lo que ocultaban esos Presupuestos Generales que con tanto celo guardaba el Gobierno hasta después de las elecciones andaluzas, tenemos nuevas razones para desconfiar. Nunca, hasta ahora que la han aprobado, el PP había hablado de su intención de hacer una amnistía fiscal para premiar a los defraudadores. Y, aunque prometían que, con ellos en el poder, España no rendiría cuentas a nadie, le han presentado los Presupuestos Generales del Estado a un enviado de Angela Merkel, antes de llevarlos al propio Parlamento Español. En definitiva, ahora que ha llegado al poder, el PP está haciendo lo contrario de lo que prometió. La noche en que ganó las elecciones, Rajoy dijo que nadie tenía que sentir "inquietud ninguna". Pero con una situación como la actual, donde la vida es más cara, el empleo más precario, los impuestos más altos y las perspectivas de recuperación nulas, es difícil seguir creyendo en el milagro.
A lo que interesa Juan Carlos... os vais a cargar los guerristas a Schz Teruel y vas a ser tu el próximo Sec Gral del PSOE de Almería, como se dice por ahí, o no aspiras al puesto?? Qué tiene pensao hacer Nono Amate contigo??
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