Simón Ruiz
Redactor-Jefe de La Voz de Almería
El cambio está en El Toyo. A las once de la mañana de ayer llegaba al Palacio de Congresos el presidente de la Junta y secretario general del PSOE andaluz, José Antonio Griñán. Lo hacía junto al que se presupone será su número dos en cuestión de horas, Mario Jiménez. Era la primera señal evidente de que el cambio llega al socialismo andaluz, dos años y pico después de que Griñán cogiera el relevo de Manuel Chaves al frente de la principal federación socialista. La actual número dos, Susana Díaz, llegaba más tarde. Ya está, ¿o no?, en un segundo plano de la política andaluza.
El líder Griñán ya es más líder. Y más tras ser refrendada por las ocho delegaciones provinciales su gestión como líder político. Por eso, el aval de los votos le permite emplear la palabra cambio para que de ella se impregnen los casi 2.000 militantes y simpatizantes socialistas que hay en El Toyo.
Una palabra que corrió de boca en boca cuando congresistas e invitados quedaron impresionados con el aspecto que ahora presenta el Palacio de Congresos, el Centro Polivalente, después de casi siete años de inactividad. Si la mala experiencia -errores tras errores- del cónclave federal del PSOE en Sevilla sirvió para que determinadas circunstancias no se repitan este fin de semana, la cita andaluza en la urbanización almeriense ha servido para demostrar, según Griñán, “al Ayuntamiento de Almería que aquí tiene toda una joya para organizar congresos”. Carmelo Torres, del ente municipal, aprovechó ayer el evento para mostrar las instalaciones a un colectivo que ha puesto sus ojos en El Toyo.
El Palacio gusta. Y mucho. Lo dijo José Antonio Griñán a LA VOZ DE ALMERÍA nada más llegar al recinto. “Este centro que usted ve aquí – dijo dirigiéndose al periodista – es una obra espléndida de un gran arquitecto, Antonio González Cordón, que ha contado con la colaboración de Luis Fernández y otros arquitectos almerienses. Es la primera vez que se celebra aquí un encuentro como este. Quiero que vea el Ayuntamiento y los empresarios almerienses, junto a otros sectores sociales, que tienen aquí un centro maravilloso para congresos como este”.
Los elogios hacia Almería por parte de Griñán no quedaron ahí. Antes, había aprovechado para destacar las ‘cualidades’ políticas del PSOE en esta provincia que ha encontrado la dirección regional para confiar en sus dirigentes los preparativos de la cita congresual. “Esto es lo más bonito de todo. Es la provincia donde antes nace el sol en Andalucía. Es una provincia con progresistas y socialistas ilustres y es la provincia de la fachada mediterránea que tiene más porcentaje de voto socialista. Desde Gerona hasta Málaga, Almería es la provincia que mejor está aguantando la fuerza del Partido Popular”, resaltó.
Siguiendo ese argumento, casi un año después del congreso extraordinario del PSOE de Almería, el líder socialista andaluz opinó que la dirección provincial, “joven y capaz”, está ayudando a que “toda la gente esté feliz” en la capital almeriense hasta la clausura del evento mañana domingo.
Apenas fueron cinco minutos los que habló José Antonio Griñán ante la prensa, el tiempo suficiente para dejar constancia de sus elogios hacia El Toyo y el PSOE de Almería y para dejar sentenciado que “no tengo críticos, que sepa, ¿no?”. “Saldremos fortalecidos”. Es la misma lectura que otros dirigentes andaluces transmiten también tanto en público como en privado por los pasillos del Palacio de El Toyo. Mario Jiménez y Francisco Álvarez de la Chica, de Huelva y Granada, respectivamente, coincidieron a su llegada al Plenario bajo la mirada atenta de un fotógrafo y de delegados que ven a ambos como coprotagonistas. El primero, porque será la mano derecha de Griñán en el “nuevo tiempo” del socialismo andaluz. El segundo, porque será, o tiene muchas papeletas para serlo, portavoz en el Parlamento andaluz.
Jiménez y De la Chica, cruzándose también en los pasillos con consejeros como Antonio Ávila o Luis Planas, suenan como hombres fuertes. También habrá mujeres de peso político. “Soy de la tropa. Siempre quiero trabajar”, decía a LA VOZ la extitular de Agricultura, Clara Aguilera, mientras otro granadino, Manuel Pezzi, ya perfila “la segunda modernización y media” de Andalucía.
En un Palacio almeriense convertido en “corazón del socialismo andaluz, español y europeo”, según palabras del presidente del Congreso, el almeriense José Luis Sánchez Teruel, las quinielas y cábalas sobre la nueva dirección regional también están presentes, aunque quizá más que centrar los pensamientos en estos días de Ponencia Marco, informe de gestión y elección de la Ejecutiva, los delegados trabajan en los que serán sus congresos más cercanos, los provinciales del próximo sábado. También hay hueco para las sorpresas, como la llegada como invitada de Carmen Chacón, de orígenes almerienses.
Se nota en el ambiente. Los movimientos internos en Sevilla o Cádiz están provocando recelos en ambas delegaciones, con personajes destacados como Fernando Rodríguez Villalobos, Juan Espadas, Luis Pizarro o Francisco González Cabaña. O en Jaén, donde su eterno líder, Gaspar Zarrías, decía ayer que no estaba ya en cuitas internas. “El secretario provincial es Francisco Reyes”. El exsecretario de Estado y exconsejero quiere estar en un segundo plano en este congreso, pero muchos le sitúan en plenas negociaciones. Las que vendrán la madrugada del sábado al domingo. Tocará informar de ellas. Y de los cambios. Y de El Toyo. Ya lo dijo Susana Díaz. “Este congreso es un lujo”.
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