Juan Folío
La Opinión de Almería
El Partido Popular pierde siete puntos en menos de un mes. Si hoy hubiera elecciones generales volvería a ganar, pero lejos de la holgada mayoría que obtuvo en noviembre (13,9 puntos). Conseguiría solo 5,3 puntos de diferencia, con el 30% de los votos, según una encuesta de Demoscopia para ‘El País’. Hasta en los propios votantes del PP se refleja el malestar de los ciudadanos por los recortes del Gobierno, entre ellos la reducción de las prestaciones a los desempleados, los recortes a los funcionarios y la subida del IVA.
La gran mayoría cree que Rajoy está desbordado por la situación. Un 78% opina que no la tiene controlada, un 70% le ve intranquilo, el 65% considera que no está a la altura de las circunstancias, un 64% percibe que no sabe qué hacer y un 59% que no ha sabido negociar ante Europa. Dos de cada tres españoles están convencidos de que España será intervenida.
La situación del PP recuerda a la sufrida por los socialistas en mayo de 2010, cuando Zapatero se vio forzado por Bruselas a desandar su propio proyecto para salvar a España de una intervención. El entonces presidente del Gobierno no consiguió levantar cabeza después de aquello. Los recortes de Rajoy, ahora, mucho más brutales que los del socialista, pueden significar un principio del fin a solo ocho meses de llegar a la Moncloa.
A pesar esto, el PSOE no consigue sacar rédito al desplome del PP. Sube 1,6 puntos desde el sondeo anterior, aunque su labor en la oposición no es aprobada por los ciudadanos, que siguen castigándole.
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