Luis Rogelio Rodríguez-Comendador
Alcalde de Almería
La única manera de encarar con éxito la superación de los desastres que hemos podido padecer en la comarca del Levante en las últimas horas es pensar que la vida continúa y que se pueden extraer mensajes positivos entre tanto dolor y tanta desolación. Esa es la conclusión que pude extraer recorriendo las zonas afectadas horas después de las inundaciones. Todos los testimonios de los vecinos de la zona, así como los de los de profesionales y voluntarios coincidían en señalar que no es momento de bajar los brazos sino de seguir adelante con ilusión y más coraje. Esa entereza y esa solidaridad son, probablemente, los mejores efectos de una riada de consecuencias trágicas que ha provocado víctimas mortales e incontables daños materiales. Lo de menos es que a esa hora muchos de los que me acompañaban y yo mismo hubiéramos debido estar en El Ejido celebrando el XII Congreso Provincial del PP. Cuando hay almerienses que sufren la pérdida de un familiar o un amigo, cuando hay vecinos que han perdido su casa o su vehículo o hay otros que tienen todavía el susto metido en el cuerpo, nuestro sitio está junto a ellos.
La única manera de encarar con éxito la superación de los desastres que hemos podido padecer en la comarca del Levante en las últimas horas es pensar que la vida continúa y que se pueden extraer mensajes positivos entre tanto dolor y tanta desolación. Esa es la conclusión que pude extraer recorriendo las zonas afectadas horas después de las inundaciones. Todos los testimonios de los vecinos de la zona, así como los de los de profesionales y voluntarios coincidían en señalar que no es momento de bajar los brazos sino de seguir adelante con ilusión y más coraje. Esa entereza y esa solidaridad son, probablemente, los mejores efectos de una riada de consecuencias trágicas que ha provocado víctimas mortales e incontables daños materiales. Lo de menos es que a esa hora muchos de los que me acompañaban y yo mismo hubiéramos debido estar en El Ejido celebrando el XII Congreso Provincial del PP. Cuando hay almerienses que sufren la pérdida de un familiar o un amigo, cuando hay vecinos que han perdido su casa o su vehículo o hay otros que tienen todavía el susto metido en el cuerpo, nuestro sitio está junto a ellos.
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| Griñán, en Vera |
No hay dudas ni vacilaciones. Ya llegará el momento de establecer los debates sobre los riesgos climáticos o las políticas urbanísticas. Ahora es el momento de acompañar a los vecinos, de escucharles y consolarles. De decirles que ni están, ni van a estar solos. En el PP solemos decir que somos el partido de la gente. Y es verdad que lo somos. Por eso sabemos que ahora toca compartir con los vecinos el barro y la angustia de ver que en unos pocos minutos una vida entera puede dar un giro inesperado y dramático.
Ya llegará el momento, sin duda próximo, de establecer los canales de ayuda y las partidas para paliar estos graves daños, como señaló la ministra de Fomento, Ana Pastor, en el recorrido que realizó por la zona dañada, mientras le mostrábamos los principales destrozos causados por la fuerza de las aguas. Ahora es tiempo de escuchar a los vecinos y compartir su razonable preocupación. Pero también es tiempo de mostrar confianza en el furturo.
Almería es fuerte y está curtida en la superación de desgracias. Esta no es la primera ni será la última. Y como todas ellas, será superada con creces por nuestro carácter emprendedor y nuestro indesmayable espíritu de resistencia. La comarca entera del Levante sabrá salir de esta situación en un plazo de tiempo muy breve. Para ello contará con la ayuda de las administraciones y la resolución de sus gentes. Los vecinos de todas esas localidades saben que ni han estado, ni van a estar solos, para superar esta calamidad.
Ya llegará el momento, sin duda próximo, de establecer los canales de ayuda y las partidas para paliar estos graves daños, como señaló la ministra de Fomento, Ana Pastor, en el recorrido que realizó por la zona dañada, mientras le mostrábamos los principales destrozos causados por la fuerza de las aguas. Ahora es tiempo de escuchar a los vecinos y compartir su razonable preocupación. Pero también es tiempo de mostrar confianza en el furturo.
Almería es fuerte y está curtida en la superación de desgracias. Esta no es la primera ni será la última. Y como todas ellas, será superada con creces por nuestro carácter emprendedor y nuestro indesmayable espíritu de resistencia. La comarca entera del Levante sabrá salir de esta situación en un plazo de tiempo muy breve. Para ello contará con la ayuda de las administraciones y la resolución de sus gentes. Los vecinos de todas esas localidades saben que ni han estado, ni van a estar solos, para superar esta calamidad.
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