El PP, siempre en campaña, politiza hasta la tragedia

José Luis Sánchez Teruel 

Secretario General del PSOE de Almería 

El pasado lunes, el presidente del Partido Popular de Andalucía, Juan Ignacio Zoido, reunía en Vera a "sus alcaldes" para analizar los daños producidos por las fuertes precipitaciones registradas en la provincia. En ese encuentro, al que también asistió la delegada del Gobierno de Rajoy en Andalucía, Carmen Crespo, Zoido cuantificó los daños en 100 millones de euros y pidió premura en la llegada de las ayudas a la zona, "que tiene necesidades urgentes y perentorias que atender", dijo. Sin embargo, Carmen Crespo, a un lado y el presidente de la Diputación, Gabriel Amat, al otro, callaron y atendieron disciplinadamente el análisis del jefe de su partido en Andalucía, que actuó como ¿representante del Gobierno? a pesar de que sólo -que sepamos- puede representar a la ciudad de Sevilla, como alcalde que es de esa localidad, y al Partido Popular andaluz.

Zoido, en Vera

Al parecer, ni Crespo ni Amat, legítimos representantes de dos Administraciones, la central y la provincial, tenían nada que decir ni nada que trasladar a esos municipios ni a los representantes -a los alcaldes y sólo a los alcaldes del PP- de los ciudadanos afectados por las graves consecuencias del temporal. Un acto de partido en la zona de la tragedia revestido de encuentro institucional nos da la idea de cómo se mueven los populares en este tipo de situaciones. Con la bandera de la gaviota ondeando a los cuatro vientos, reunieron a los alcaldes del Partido Popular para plasmar en una fotografía… ningún compromiso.

En esa instantánea no encontrarán a los alcaldes socialistas de Lubrín y Bédar o a la alcaldesa de Los Gallardos, localidades que sufrieron también, y de qué manera, las devastadoras consecuencias del temporal de lluvias. Tampoco estuvieron en la visita que realizó la Reina Doña Sofía el pasado sábado por expreso deseo del Gobierno de Rajoy que ninguneó a estos alcaldes y a todos los ciudadanos que representan escatimándoles una invitación más que justificada al acto. La consigna fue que esa visita la tenía que capitalizar exclusivamente el Partido Popular. Nada nuevo.

Pero volvamos a la reunión de Zoido. Al líder de los populares andaluces se la jugaron sus propios compañeros de partido en la provincia al situarlo en un lugar que no le corresponde y de paso cometieron otro clamoroso error al relegar a la delegada del Gobierno de Rajoy a un papel secundario, de mera comparsa. Mientras Zoido hablaba, Crespo y Amat asentían como si estuvieran asistiendo a un acto partidista de campaña, cuando la realidad es que el terreno que estaban pisando, el de la desgracia y la desesperación, no entiende de más banderas que el de la tramitación de ayudas urgentes a los afectados. Politizar la tragedia tiene estas cosas y confundir permanentemente, como acostumbra el Partido Popular, las gaviotas con el gobierno, también.