El gigante del cooperativismo, Cajas Rurales Unidas, quedará constituído la próxima semana

Luis A. Torralba 
Valencia Plaza 

A Cajas Rurales Unidas (CRU), la fusión/absorción entre Cajamar y Ruralcaja, sólo le queda recibir el visto bueno del Registro General de Cooperativas de Crédito del Ministerio de Trabajo para comenzar a dar sus primeros pasos, toda vez que ya ha sido debidamente inscrita en el Registro Mercantil. Así lo han confirmado a este diario fuentes próximas a la operación que culminará en el mayor grupo rural español: la fusión entre los dos grupos que lideran ambas cajas, es decir, Grupo Cooperativo Cajamar (GCC) y Cajas Rurales del Mediterráneo (CRM). Las mismas que prevén recibir la autorización del Registro General de Cooperativas a lo largo de la próxima semana y así cumplir la hora de ruta marcada por la nueva entidad.

Ruralcaja y Cajamar han formado
Cajas Rurales Unidas (CRU)
Será a partir de ese momento cuando tome posesión el consejo rector de CRU y celebre su primera reunión presidida por el actual consejero delegado de Cajamar, Juan de la Cruz Cárdenas, que será nombrado presidente del gigante del cooperativismo español.

Por su parte, tal y como avanzó este diario, Bernabé Sánchez-Minguet, actual director general Corporativo y de Inversiones de Cajamar -además de coordinador de las relaciones con las entidades del Grupo Cooperativo Cajamar- será elegido como el hombre fuerte del grupo en la Comunitat Valenciana. Un auténtico revés para los intereses de Ruralcaja, que de momento ya ha perdido a dos de sus principales baluartes: Rafael Carrau, actual subdirector general de CRM, y Juan Antonio Gisbert, director general de Ruralcaja y que estaba llamado a ser consejero delegado de CRU.

Una vez tome posesión el nuevo consejo rector, iniciará su andadura Cajas Rurales Unidas y antes de final de año quedará constituido el nuevo Grupo Cajas Rurales Unidas, al que ya han aprobado su integración otras 21 cajas rurales españolas. Será el momento de tomar decisiones entre las que sobresalen, sin duda, el plan de reducción de personal. De momento vía prejubilaciones alcanzará a unos 550 empleados en Valencia, Málaga y Almería. Un plan al que podrán acogerse los empleados de todos los centros de trabajo que cumplan 55 años en 2012, o los empleados de Cajamar o Ruralcaja en la Comunidad Valenciana que cumplan 54 o 53 años en 2012. 

Ruralcaja y Cajamar mantendrán sus marcas a través de sus grupos hasta el 30 de junio de 2014, mientras que la valenciana seguirá operando como tal en la Comunitat Valenciana pese a 'solaparse' con las oficinas de Cajamar vía la extinta CajaCampo. Entre ambas y sus grupos sumarán unos activos de 42.184 millones de euros y un negocio gestionado de 70.426 millones. Un volumen que podría aumentar con la incorporación de nuevas cooperativas el próximo año, puesto que las mismas fuentes consultadas próximas a CRU tienen claro que "habrá nuevos movimientos en el sector y estaríamos encantados de sumar nuevos socios".

1 comentario:

  1. ¿Cómo puede ser que nos tengamos que enterar desde Valencia todo lo que se cuece en Cajamar? Estos de Valencia Plaza son unos fenómenos. Enhorabuena.

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