Con Paloma Gómez Borrero en Huércal-Overa

Rafael Ortega

Periodista

Ha dejado de ser corresponsal de COPE en el Vaticano pero no para. Este domingo he tenido la fortuna de compartir experiencias vaticanas con mi compañera y más amiga Paloma Gómez Borrero, en la localidad almeriense de Huercal Overa. Cáritas de esa localidad ha organizado una comida durante la cual hemos podido relatar hechos y acontecimientos de los últimos y actual papado y Paloma ha puesto su sabiduría y bien hacer en ese acto, en el que la organización local de ayuda a los más necesitados ha puesto todo su empeño, precisamente en el día en la que la Iglesia celebra la jornada del Emigrante y del Refugiado bajo el lema “Un caminar de fe y esperanza”.

Paloma Gómez Borrero

El Cardenal Arzobispo de Madrid y Presidente de la Conferencia Episcopal Española, Rouco Varela ha hecho pública una carta, con este motivo, en la que invita “a salir al encuentro, con el entusiasmo y la valentía que impulsaron a las primeras comunidades cristianas, de las personas inmigrantes y sus familias, a quienes la crisis golpea más gravemente. Han venido en búsqueda de unos medios de vida y del reconocimiento de su dignidad de personas, atraídos por nuestro bienestar y también porque necesitamos su trabajo”. El Cardenal de Madrid ha instado a “desarrollar una convivencia y una hospitalidad brindada al inmigrante, sea cual sea su raza, cultura y religión, rechazando toda exclusión o discriminación, respetando y promoviendo los derechos inalienables de las personas y pueblos”.

No podía ser más oportuna, pues, la invitación de Cáritas de Huercal Overa a Paloma Gómez Borrero, quien ha tenido la oportunidad de explicar la labor que hace la Iglesia Universal en favor de los más necesitados y el sufrimiento de los Pontífices cuando viajan a países del tercer mundo y ven las penurias por las que pasan los habitantes de las zonas visitadas. Pero también en este primer mundo hay esas necesidades y, por ejemplo, Cáritas de esa localidad almeriense ha repartido estas pasadas Navidades casi 20.000 comidas, en una población que ronda los 23.000 habitantes.

Paloma también ha relatado los difíciles y complicados momentos por los que ha vivido el Papa tras la “traición” de Paoletto, su ex mayordomo, quien, por cierto, tras recibir el perdón personal de Benedicto XVI ya va a trabajar en otra dependencia vaticana, en el hospital infantil Bambino Gesú de Roma. Gabriele, de 46 años, trabajará en una estructura dependiente de la sede de ese hospital recientemente inaugurada en las cercanías de la basílica romana de San Pablo Extramuros, en la zona sur de Roma. El ex mayordomo, casado y con tres hijos, reside todavía en el Vaticano, vivienda que abandonará en fechas próximas para trasladarse a otra, también de propiedad vaticana y muy cercana al hospital. Hace unos días, coincidiendo con el “perdón papal” el Vaticano hizo público un comunicado en el que se señalaba que Gabriele no recuperaría su trabajo y dejaría de vivir en el pequeño Estado, pero que “no obstante, la Santa Sede, confiando en la sinceridad del arrepentimiento manifestado, deseaba ofrecerle "la posibilidad de reanudar con serenidad la vida junto a su familia”.

Ha sido un fin de semana intenso, en el que junto con la compañera y casi hermana Paloma Gómez Borrero, hemos podido conocer de cerca la labor de las Iglesias particulares, tantas veces olvidadas. (El Imparcial)