Emilio
Ruiz
Pedro Molina, rector de la Universidad de
Almería, ha sido designado miembro del Consejo Asesor Territorial de Andalucía
de Caixabank, S. A. ¿Y ése qué puesto es? Pues expliquémoslo. Caixabank es un
banco que cotiza en bolsa y que tiene como mayor accionista a La Caixa. Tras absorber
Banca Cívica –el banco formado por Cajasol y las cajas de ahorros de Navarra,
Canarias y Burgos-, ha incrementado notablemente su presencia en algunas
comunidades autónomas. Es el primer banco de Andalucía por cuota de mercado,
con el 20 por ciento, casi el doble que Unicaja.
Pedro Molina |
A raíz de esta notable presencia territorial, Caixabank ha
decidido constituir en las regiones del lugar de origen de aquellas cajas un
Consejo Asesor “que velará por los intereses financieros y sociales de
las distintas provincias”. También “asesorará e informará a la entidad,
especialmente en aquellas cuestiones que se refieren a la situación económica
de la zona, así como de sus necesidades, perspectivas de futuro y
oportunidades”. Caixabank insta a dichos miembros “a contribuir con su esfuerzo
a difundir los valores de la entidad: liderazgo, servicio, confianza y un
fuerte compromiso social”. El Consejo Asesor de Andalucía lo forman doce
personas, todas ellas, salvo Pedro Molina, vinculadas al mundo de la empresa
privada. Hay representantes de Abengoa, Persán, González Byas, Covirán, Covap,
etc.
El nombramiento de Pedro Molina ha sorprendido a todos. Por
dos razones. Una, por la posible incompatibilidad del cargo. UPyD ya ha pedido
su dimisión como rector. La otra, por la también posible improcedencia de su
aceptación. Molina debería explicar ambos extremos. No sé si es lo adecuado que
el rector magnífico de una universidad pública se siente en el Consejo Asesor
de una entidad capitalista privada. Y más aún si ésta es una entidad
financiera.
Es totalmente adecuado que un rector, tal y como están las cosas forme parte de un banco. Las universidades han visto reducido su presupuesto y se les ha instado a que busquen lo que les falta en fondos privados. Además, en el sistema educativo en el que la universidad se mueve, también se les exhorta a los claustros a que promuevan másteres financiados total o parcialmente por empresas, con el fin de formar a sus futuros empleados.
ResponderEliminarLa situación es esa. Si nos regimos por lo actual y lo aceptamos, es más que adecuado que un rector tome parte.
Lo que es criticable es la situación que lleva a los rectores a ser las concubinas de los visires financieros. Cuando la formación de especialistas (nos pongamos como nos pongamos, la universidad no forma otra cosa; pero ese es otro debate) depende de las necesidades, no ya de la sociedad, sino de los mercados, es más que adecuado que los rectores flirteen con quienes les aseguran los puestos de trabajo.
Si UPyD considera que esto es algo inaceptable, que promuevan un cambio en la forma de concebir la educación superior y que (por favor) la cambien. Los universitarios lo agradeceremos y estoy seguro de que la sociedad también lo hará. Mientras tanto, su rechazo a tal propuesta tiene la misma repercusión que un brindis al sol.
Hay que tener poca verguenza... en resumen . Promover los valores desde un banco , los mismos valores que no tiene... ni demuestra como rector... a la espera del enriquecimiento en el futuro, cuando suelyte el timon de la universidad y deje a todos tirados... eso si es un brindis al sol...
ResponderEliminarLey Ley 3/1995, de 8 de abril, de incompatibilidades de altos cargos es muy clara:
ResponderEliminar1) Son altos cargos: "los presidentes, directores y asimilados de los organismos autónomos de la Junta de Andalucía" (art. 2g). La universidad de Almería es un organismo autónomo de la Junta de Andalucía y el Rector, Pedro Molina, es el asimiliado o equivalente a presidente o director del organismo.2) Y el art. 3 c establece la incompatibilidad: "Con el ejercicio de cargos, por sí o por persona interpuesta, que lleven anejas funciones de dirección, representación o asesoramiento de toda clase de compañías, sociedades mercantiles y civiles, y consorcios de fin lucrativo, aunque unas y otros no realicen fines o servicios públicos ni tengan relaciones contractuales con las administraciones, organismos o empresas públicas". Está, pues, incluida en la incompatibilidad el asesoramiento. Pedro Molina, por mucho que diga (los sinvergüenzas no suelen dimitir y es preciso destituirlos), al aceptar ser asesor de Caixabank está actuando de forma ilegal, aparte de modo poco ético.
Quien puede y ha de destituirlo es el Presidente del Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía, es decir, José Antonio Griñán. Espero que él no incumpla también con la ley, pues sería más grave aún.
José Antonio Griñán ha sido testigo de la forma de actuar de Pedro Molina, reprimiendo a quien exige que se cumpla con la ley. Ya me sancionó con 4 años y 3 meses por denunciarlo a la Fiscalía por prevaricación y tráfico de influencias. Sr. Griñán, ¿le parece a Usted poca represión esa y la que se ve en el vídeo?:
http://www.youtube.com/watch?v=2vcT9TJR_v0