Emilio Ruiz
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El
vicesecretario de organización del Partido Popular, Carlos Floriano, anda empeñado en la ardua
tarea de hacerse una caricatura de sí mismo. Algunos de sus compañeros de filas
andan diciendo y haciendo tonterías a diestro y siniestro, y al pobre Floriano,
dicho sea con respeto, es al que mandan a justificar lo injustificable ante los
medios de comunicación.
Carlos Floriano |
Cuando
lo que hay que justificar no tiene justificación alguna, lo normal es que uno caiga
en el ridículo. Y es el en ridículo donde un día y otro cae Floriano. El
diputado tiene tras sí una amplia experiencia como parlamentario, lo que algo
le habrá ayudado a crearse cierto grado de formación, y es, además, según
parece, doctor en Derecho. Sus salidas de tono y sus muestras de ignorancia,
premeditadas o no, prueban que ni una cosa ni la otra le han servido para
mucho.
El “Caso
Bárcenas” está siendo para él la prueba del algodón que muestra su capacidad. Y
no la ha superado. No da el hombre pie con bola. Cada vez que abre la boca,
suelta disparate tras disparate a cuál más disparatado. Si no fuera por el
momento de desconcierto que vive estos días el Partido Popular, Floriano habría
sido ya destituido de sus cargos en el partido y el Parlamento por incompetente
e ignorante.
Empezó
Floriano su carrusel de despropósitos calificando como funcionarios a los
empleados del Partido Popular. Lo siguió anunciando que a un imputado no se le
puede despedir, algo totalmente incierto porque los despidos solamente se
consideran nulos en casos muy puntuales en los que no se incluyen la imputación.
Lo prosiguió anunciando que si se despidiera a Jesús Sepúlveda, éste podría
acudir a Magistratura de Trabajo, un órgano jurisdiccional que hace muchísimos
años que no existe. Hoy, los contenciosos laborales se dirimen en los Juzgados
de lo Social. Y lo remató, en una primera fase, afirmando que él, como
vicesecretario de organización del partido, no sabe a qué se dedica Sepúlveda y
tampoco sabe cuál es su sueldo.
La
guinda al pastel se la ha puesto Carlos Floriano a finales de esta semana
anunciando, sobre Bárcenas, que "para nada" se trata de un fraude de
ley que se continúa cotizando por la Seguridad Social
de un trabajador que tiempo ha fue despedido. ¡Dios, cómo puede acumular este
hombre tanta ignorancia! Es "algo que se viene haciendo", apostilla. ¡Comor!,
que diría Chuiquito de la
Calzada.
El
dirigente popular ha esgrimido, además, como ejercicio de transparencia que el
PP le haya pagado a Luis Bárcenas la Seguridad Social.
"Fíjese qué mayor ejercicio de querer ocultar nada, que sigue estando dado
de alta en la
Seguridad Social y pagando". Esto es fuerte, muy fuerte.
Y más fuerte aún que Floriano siga ocupando los mismos cargos que ocupaba antes
de embarcarse en esta vorágine de despropósitos.
Que coñazo................emilio.............cambia el tercio..................
ResponderEliminarGracias sr Ruiz, no poner de relieve los despropositos del tal Floriano supondria permitir que colaran en la opinion publica.
ResponderEliminarEsta palmaria incompetencia de la clase politica es revelacion su inanidad dado que, los conservadores en particular, proclaman que el mercado se encarga de todo, de modo que los politicos no pintan nada y en consecuencia pueden salir a balbucear cosas unos especimenes como el tal Floriano.