Nuevos aires en el socialismo almeriense

Manuel López Jerez

Militante socialista

Leyendo la historia del socialismo almeriense del siglo pasado, me surge la necesidad de pensar en la intrahistoria de miles de militantes sin rostro que fueron  el socialismo real, el que  demandan los ciudadanos. Aquellos que dedicaron mucho esfuerzo y lucha en la consecución de un país democrático y no pelearon por cargo alguno. Aquellos que hicieron posible  la llegada al Gobierno de la nación del Partido Socialista Obrero Español. Nos habla la  historia de militantes socialistas destacados, de los grupos y corrientes políticas a las que pertenecieron y  de los que las  lideraron. 

José Luis Sánchez Teruel

En cambio, nadie habló ni habla del socialismo ciudadano y anónimo. Es en éste  en el que me gusta que se miren y sean referentes  los  dirigentes de mi partido.

Algunos integrantes de uno de aquellos grupos, los llamados guerristas, la vieja guardia, como les gusta llamarse a ellos, se han reunido días pasados para celebrar el veinticinco aniversario de la creación de dicho grupo. Recordar el pasado es muy loable. Recrear escenas de batallitas ganadas, muy emocionante. Debemos agradecer a estos compañeros su  aportación al pasado político del PSOE almeriense.

Desde la frescura de quien no ha tenido cargo institucional alguno, de un militante que llega a una organización política con muchas ideas que aportar, siento que desde que llegaron los nuevos aires estamos cada día mas fuertes, recortando distancias al PP y con un Amat en horas bajas. Aunque observo que aquellos que llevan de una u otra forma 25 años en esto y  la vida  les ha tratado muy bien podrían ayudar más a estos nuevos aires en lugar de dedicarse a hacer todo lo contrario.

La ciudadanía insiste, según las encuestas, en la regeneración de los partidos políticos, en la necesidad de nuevas formas de hacer política, en la democratización interna y en la transparencia del funcionamiento orgánico. La ciudadanía  ha madurado, intensamente, con la llegada de esta tremenda crisis que atravesamos, y reclama, con voz alta y clara, cambios en las organizaciones políticas para dar aire fresco a la democracia y a la política, nuestro mayor tesoro para hacer progresar a la sociedad.

El PSOE almeriense no está en la nostalgia de los años vividos en el siglo pasado. Los militantes socialistas de la provincia de Almería están en construir un presente y un futuro lleno de  esperanza, partiendo de una verdadera regeneración interna, basada en valores y no en intereses,  que para esto ya está el Partido Popular.  Los modelos  de gestión política  donde el apellido y la pertenencia a determinados grupitos eran el criterio de valoración y de selección para dirigir el partido ya no están de moda, ni gustan, por suerte, a la ciudadanía; es más, me atrevería a decir que producen rechazo hacia quienes los defienden y/o representan. Seamos transparentes y sinceros.

Las  vivencias de la niñez, en nuestro barrio o pueblo, el gran sacrificio de nuestros padres y su apuesta por educarnos en valores sociales,  la diversidad de personas con la que hemos construido nuestra identidad socialista…  ese es nuestro mayor valor y nuestra mayor valía. Los ciudadanos almerienses, ellos solitos, conocen mejor que nadie quién es quién, de dónde veníamos y cómo hemos evolucionado personal y profesionalmente, y si ello ha sido o no gracias al  amparo del   poder.

La transparencia y los valores socialistas del secretario general del PSOE almeriense, José Luis Sánchez Teruel, están fortaleciendo al socialismo almeriense con un liderazgo basado en la integridad y la autenticidad socialistas, y eso puede que moleste a algunos. Pero es lo que demanda la sociedad. La valentía política de este excelente líder socialista provincial está creando una nueva cultura organizacional de partido, donde predomina el esfuerzo, el compromiso, el trabajo, los valores, el  mérito y la valía, para construir el PSOE almeriense del siglo XXI, el socialismo del siglo XXI, el socialismo de las personas, no el socialismo de los dirigentes.