Redactor-Jefe de La Voz de Almería
La parlamentaria andaluza y senadora autonómica del
Partido Popular Rosario Soto ha retomado de manera muy activa la política
regional. Tras permanecer varias semanas ‘apartada’ de su escaño en Sevilla y
Madrid, Soto dedica ahora la mayor parte de su tiempo a explicar la posición de
su partido ante el decreto de la
Junta de medidas contra la exclusión social.
Rosario Soto / La Voz |
Portavoz del PP-A en Políticas Sociales y secretaria de la Interparlamentaria ,
cargo para el que fue elegida en el congreso de Granada en julio de 2012, a sus obligaciones en
la Cámara
autonómica y el Senado sumó el pasado 7 de febrero la de madre de la pequeña
Cristina Nikh.
‘Permiso’ de Amat y Zoido
¿Es el primer caso de una política almeriense que tiene que compaginar las
obligaciones familiares con las parlamentarias? No. Ni tampoco será el último.
“Compaginar todas las tareas es muy dificultoso y doloroso. Recuerdo la pena
que me dio separarme de mi bebé cuando apenas tenía cinco o seis semanas de
vida. Sabes que la niña te necesita. Te identifica como madre desde el primer
día”, comentaba Rosario Soto recientemente al finalizar un Comité de Dirección
presidido por José Luis Sanz y Gabriel Amat.
Hacia el presidente provincial y el andaluz, Juan Ignacio Zoido, tiene palabras
de agradecimiento. “Están siendo comprensivos conmigo. Por ejemplo, tengo
permiso para no ir a la provincia en el actual proceso de renovación de juntas
locales”.
Licenciada en Ciencias Políticas y Sociología, Soto Rico reconoce que es
“difícil” en estos casos la llamada y ansiada conciliación de la vida familiar
y laboral. En el Parlamento andaluz sí existe la posibilidad de ‘acogerse’ a
una baja maternal y delegar el voto en un compañero de grupo. En el Senado, no.
En ambas cámaras no se dispone, tampoco, de servicio de guardería.
De domingo a viernes
“La semana pasada, me fuí el domingo por la noche a Sevilla. El lunes y el
martes estuve en Sevilla. El miércoles subí a Madrid y el jueves regresé al
Pleno del Parlamento andaluz. Estuve sin ver a Cristina cinco días. No la ví
hasta la madrugada del viernes, en casa de mis padres. Tengo la buena suerte de
contar con su ayuda. (...) Yo no soy una excepción. Todas las mujeres que
trabajan lo tienen muy difícil”, comenta, mientras repasa los apuntes de su
próxima intervención en el Pleno del Parlamento para convalidar el decreto de
medidas extraordinarias y urgentes contra la exclusión social.
Entre viajes en coche y AVE, entre biberón y biberón, la también exconcejal en
la capital asegura estar dedicada en estos días plenamente a su labor de
portavoz de Políticas Sociales. “Lo que necesitan los andaluces - repite en
cada una de sus comparecencias - es un empleo. No un decreto lleno de trampas”.
“Cinco minutos de discurso en el Parlamento requiere de muchas horas de
estudio, de reuniones con alcaldes, ...”. Acaba la conversación. Soto mira el
reloj. “Toca el siguiente biberón”.
Paniaguada que ademas debería decir quien es el padre, que asco de politicos.
ResponderEliminar¿y el tuyo?
Eliminar¿Y por que no se da de baja? Es lamentable la imagen de los políticos. Esta política al igual que los que la han nombrado se sienten unos iluminados y tocados por la gracia del Dios al que siempre rezan, piensan que gracias a ellos la sociedad funciona, si no se levantan por la mañana no sale el sol, sin ellos nada funcionaría. Tomando ejemplo de las malas empresas y de los clubes exclusivos dónde, si no estás, desapareces, o temiendo que alguien ocupe su puesto. Rosario, entre tu hija y el innecesario, caduco e inútil Senado, la elección es muy sencilla. Tu misma.
ResponderEliminarEsto son las cosas que tiene la política, el poder y el querer ser.
ResponderEliminarP.E.L.O.T.A oficial del reino
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