Sobres para todos

Marcial Vázquez
Teleprensa

Dentro de pocas semanas se cumplirá el primer aniversario del crédito en condiciones ventajosas que obtuvo el Gobierno de la Unión Europea. Sí, ese crédito que no iba a suponer esfuerzos adicionales y que, por supuesto, iba a pagar exclusivamente la banca española. La indecencia en los actos de este gobierno protofascista del PP solamente es comparable a la perversión de sus mentiras, con un lenguaje que intenta edulcorar unos hechos que no solamente son políticamente indignos sino que muchos de ellos responden a impulsos sociópatas de un partido que desprecia a las clases humildes y desfavorecidas.

Lo que está claro es que si el PP se pusiera a trabajar para el conjunto de los españoles de la misma manera que cuida de “la familia”, hace meses que la crisis en España sería ya un recuerdo innombrable, al estilo de Voldemort en la historia de Harry Potter, con la diferencia de que aquí, en España, no existen magos buenos porque las únicas varitas que tenemos las usan los dirigentes de la derecha para enlomar las espaldas de todos los ciudadanos, con la excepción de los ricos, la banca y la Iglesia. La Iglesia entendida como jerarquía excluyente, porque aquel eslogan de “la Iglesia somos todos” ha terminado por ser tan cierto como el de “Hacienda somos todos”. Y así sucesivamente.

En nuestra democracia hemos llegado a un punto donde los miembros del partido que gobierna admiten que han cobrado sobresueldos y aquí no pasa nada. Es la estrategia a seguir por parte de la derecha: si hemos cometido ilegalidades o inmoralidades que parezca que son comportamientos lógicos y normales. Ayer el presidente del Senado admite el cobro de sobres adicionales mensuales y hoy, cuando se publique mi artículo, seguirá en su cargo y sin haber dimitido. Esta es la nueva trasparencia del PP: el latrocinio incoloro, inodoro e insípido. Porque no solamente Escudero admite el cobro, sino que Nasarre también. Muchos se preguntarán quién es Nasarre, incluidos miembros de NNGG en donde la mayoría no saben de dónde vienen pero sí a donde van: al poder. Y Nasarre fue el creador de esa teoría llamada “centro reformista”, que se convertiría en la piedra filosofal ideológica de José María Aznar. Con esto quiero decir que Nasarre no era un don nadie dentro del Partido Popular.

El problema llega cuando tenemos a un presidente del Gobierno que sigue sin aclarar si cobra por su plaza de registrador de la propiedad y, en el caso de cobrar, cuánto lleva cobrado desde entonces. Sobre este tema ya hubo una denuncia, al no ser compatible, pero se ha convertido en un acertijo de compleja solución porque parece que los bloqueos son evidentes con tal de no aclarar algo tan sencillo como sería que Rajoy no cobra un sueldo adicional que además de inmoral sería ilegal. Entiendo que esto no le preocupe a un personaje que en plena crisis se subió el sueldo un 27%.

Los españoles no nos merecemos un gobierno que mienta, ni un gobierno que robe. Los papeles de Bárcenas y los cobros en B nos llevarían a la conclusión de que todo el partido que sustenta el gobierno actual, e incluso gobiernos anteriores, ha pasado por el despacho del tesorero para llevarse su sobresueldo como recompensa por los sacrificios que han tenido que hacer en nombre de España, que no por España.

En el PP, como no podía esperarse otra cosa, hablan de Filesa, como si Filesa fuese más grave que el caso Bárcenas que aún está por escribir. Es posible que, hasta ahora, el PSOE haya sido el único partido condenado por financiación ilegal, junto con UDC. Pero que nadie olvide que la derecha española, desde el fallido caso Naseiro, ha llegado hasta nuestros días cabalgando a lomos de un saqueo llamado Gürtel y de unas prácticas habituales e ilícitas llamadas sobre sueldos. Si alguien en este país no puede dar lecciones de moral y honradez este es, sin duda, el Partido Popular al completo, empezando por Aznar y acabando por Rajoy. Fraga descansa en paz.