Teleprensa
Editorial
Cuesta
trabajo escuchar por boca del PP, de su secretario provincial, Javier Aureliano
García, la pasividad con la que reciben sentencias que condenan a gentes de sus
filas. Con un lacónico 'las sentencias están para cumplirlas' se quita de en
medio y espera que el alcalde de Cantoria, Pedro Llamas, cumpla con la
sentencia del Tribunal Supremo, sobre la que ya no cabe recurso alguno, que le
condena a una pena de dos años de prisión y 23 meses de inhabilitación para
desempeñar un cargo público por los delitos de falsedad en documento público y
omisión del deber de perseguir delitos.
Pedro María Llamas, alcalde de Cantoria |
Pero si la sentencia es firme ya no
hace falta que el PP empuje al edil a dejar el banco porque es la propia
Justicia la que se lo ha retirado. Lo que el Partido Popular si puede hacer, y
ya está tardando, es echar de sus filas a un sujeto que ha dicho que tardará
poco para tomar una decisión sobre si abandona la política o espera a que pase
este proceso de inhabilitación para volver a la carga. Francamente, parece
mentira que tenga nada que pensar. Y resulta más lamentable aún que pueda
querer pactar con la dirección del PP una retirada callada para encabezar a la
vuelta de dos años una candidatura por este municipio.
Aunque
la Justicia
establezca tiempos de condena, una mala administración a sabiendas como se
desprende de algunas coletillas que aparecen en los dictámenes judiciales
debería ser suficiente para que una persona no osara un segundo intento pero
más aún para que un partido las tuviera en cuenta y no volviera a caer en el
error de dejar una administración en manos de quien ya ha demostrado no sabe o
no quiere hacer bien las cosas.
Este
PP al que tanto le gusta hacer cribas en partidos ajenos ante la menor sospecha
de actitud irregular, resulta demasiado comedido cuando la rotundidad de hechos
poco lícitos queda demostrada en una sentencia judicial. Ya tuvimos antes el
caso del alcalde de Somontín, al que le abrieron la alfombra del Grupo Mixto
para seguir gobernando mientras recurre o en Zurgena, donde tampoco importa que
haya un concejal condenado si de esta manera se consigue mantener el gobierno
local. Todo un ejercicio de cinismo que ni la oposición es capaz de aprovechar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario