Llega el gobierno del "cambio"

Isabel Morillo

Jefa de Andalucía de El Correo de Andalucía

“Cambio, relevo, nuevo tiempo”. José Antonio Griñán, el presidente más breve de la historia autonómica, firma hoy su cese en el Consejo de Gobierno con la promesa de PSOE-A de que se abrirá un nuevo tiempo en un momento crucial para Andalucía y cuando la crisis sigue sin dar un respiro. El también presidente del PSOE se despide formalmente apenas dos meses después de que anunciara por sorpresa que no iba a volver a ser candidato. Le sustituirá Susana Díaz, la primera mujer que accederá a la presidencia, que con sus 39 años representa “un cambio histórico” y el acceso de una “nueva generación” al poder, según vendió ayer el vicesecretario general del PSOE-A, Mario Jiménez.

Uno que se aleja, otra que se acerca
Foto: Público

Ese es el mensaje oficial: Griñán se va en un gesto de generosidad para regenerar la política. Pero no es la única razón, los socialistas confían en marcar un punto de inflexión con la marcha del dirigente socialista, asediado por el escándalo del fraude de los ERE, que supondría la malversación de dinero público destinado al empleo. No se descarta que la jueza que instruye el caso, Mercedes Alaya, pueda imputarlo por su etapa como consejero de Hacienda, cuando recibió numerosos avisos de la Intervención sobre irregularidades administrativas en el reparto de dichas ayudas.

El propio Griñán declaró el pasado fin de semana en una entrevista en los diarios Ideal y Sur que se iba para evitar que “ningún escándalo salpicara” a la Junta. Ayer el número dos del PSOE andaluz quiso matizarlo. “No se va para asumir ninguna responsabilidad en los ERE porque no tiene ninguna responsabilidad. Es un ejercicio de dignidad y honradez”, defendió el vicesecretario general de los socialistas. “Cuando las cosas se pongan en su sitio, el gesto del señor Griñán adquirirá toda su dimensión”, sentenció.

El Consejo de Gobierno firmará hoy el cese del presidente y el Ejecutivo entrará en funciones hasta que Susana Díaz tome posesión. La fecha prevista para que Andalucía estrene el que será el Ejecutivo autonómico número 13 es el 9 de septiembre. El PSOE andaluz ni confirmó ni desmintió que Griñán vaya a ser designado senador por la comunidad autónoma, lo que significaría su aforamiento ante el Tribunal Supremo. Sería clave ante una posible imputación por los ERE. Jiménez recordó que Griñán ya está aforado –ante el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía como diputado autonómico– pero también subrayó que lo normal en la historia del partido es que el presidente del PSOE tenga escaño en las Cortes. Todo apunta a que la ejecutiva aprobará hoy la designación de Griñán como senador y según fuentes socialistas también Mario Jiménez podría ser designado representante en la Cámara Alta.

Tampoco está claro cuál es el futuro de Griñán como secretario general del PSOE andaluz. Desde el partido insistieron ayer en que el expresidente podría seguir llevando las riendas del partido hasta el próximo congreso, que tocaría dentro de tres años. Sin embargo, es una hoja de ruta que pocos se creen dentro de las propias filas socialistas. Lo natural sería que la futura presidenta asumiera también el mando en el partido. Jiménez eludió ayer descartar un congreso extraordinario. La clave está en Ferraz. El PSOE federal tiene previsto celebrar en noviembre una Conferencia Política que según el número dos de los socialistas andaluces servirá para “reformular” el partido.

Ésta es una de las incógnitas por despejar en el tablero político en los próximos meses. Pero no será la única. Se adivina una agenda política intensa. La futura presidenta de la Junta tendrá que decidir qué hacer con el Gobierno, donde las quinielas señalan numerosos cambios. De los ochos consejeros socialistas, están en el alambre Carmen Martínez Aguayo, Antonio Ávila, Mar Moreno, Luis Planas y Emilio de Llera. Suena la permanencia de María Jesús Montero y Luciano Alonso. Pero nada es seguro. La futura presidenta tendrá que cuadrar un puzzle de muchas piezas y hacer muchas componendas para garantizar la estabilidad y la paz en el PSOE-A.

La prioridad será el Presupuesto de 2014, que deberá de estar listo antes de que termine octubre y que será crucial. Los socialistas señalaron ayer que serán importantes “para la recuperación económica”, que garantizarán “la protección de las familias”, serán “austeros” y “profundamente reivindicativos” frente al Gobierno central de Mariano Rajoy.

Habrá que ver cómo resiste la coalición PSOE-IU esta etapa. Los socios han bendecido los cambios. El coordinador regional, Antonio Maíllo, confió en que el nuevo Gobierno sirva para “dar más democracia, más participación y más autonomía” a Andalucía, a la vez que pidió “alzar la voz desde el sur”. Desde el PP-A Alicia Martínez dijo que “Griñán no puede irse haciéndose el mártir porque ha maltratado y ensuciado el nombre de Andalucía”, y volvió a reclamar elecciones anticipadas.

La renuncia hoy de Griñán culmina un tiempo de transición política en Andalucía y pone final a tres de los años más complicados de la autonomía andaluza.