El nuevo Gobierno andaluz

Dolores Gómez Ferrón

Gerente de Clisol Agro

Final de verano y principio de otoño de estreno. Nueva presidenta del Gobierno en Andalucía, la primera mujer en el cargo desde el inicio del periodo democrático en nuestra región. Como mujer, me gusta. Como ciudadana andaluza, estoy expectante. Complicada tarea la de confeccionar un nuevo equipo de gobierno. Se supone que se habrá de tener en cuenta a la hora de elegirlo la situación por la que atravesamos, agudizando los criterios para dicha elección. 

Susana Díaz

Uno de los grandes hándicaps para cualquier persona que se suele mover en un determinado ámbito es conseguir tener una visión certera y lo menos equivocada posible del resto de sectores en los que suele pasar “de puntillas”. Nuestros representantes políticos no son una excepción a este aspecto. En la mayoría de los casos sus apretadas agendas no les permiten ver un poco mas allá de lo que en ese momento visitan, escuchan o se les muestra.

Me gustaría que el nuevo equipo de Gobierno tuviese una característica muy clara: rompedor de gran parte de lo establecido. Tener unos consejeros-as que para ellos prime la operatividad, la efectividad, la rapidez y la coherencia en la labor de gobierno, auténticos gestores que sean capaces de dejar de lado el horrible juego político del “y tú más”, que nos hace a los ciudadanos estar tan desencantados de ellos.

Gestores que asuman su responsabilidad en la medida necesaria cuando cometan errores, que se dejen de eufemismos y discursos establecidos, que sean llanos y sencillos en su contacto con los ciudadanos. Que le duelan más éstos que la disciplina de su partido.

Para que ocurra todo lo anterior es imprescindible también que sean conocedores exhaustivos de los problemas y prioridades de cada sector. Hablando del agrícola, no me cabe la menor duda de la necesidad de que se nombre como consejero-a a una persona que sea del sector, que sea dinámica, innovadora, coherente en sus criterios, que sus decisiones a medio y largo plazo sean sostenibles.

Si lo pensamos fríamente debería de tener las mismas características que tiene hoy en día el sector agrícola almeriense. Seria un valor no solo para nuestra provincia sino para toda Andalucía.

Alguien hibridador, que su experiencia de vida en nuestro sector le permitiera ver más posibilidades de innovación en transversalidad con otros sectores de la economía andaluza como el turismo.

El potencial para aportar valor añadido a nuestros productos agrícolas es inmenso y esta ahí, necesitamos a alguien con un completo training en el sector.