Por qué es necesario cambiar la Ley Electoral en Andalucía

Alicia Cifuentes Salazar
UPyD. Agrupación Local Almería

Tras más de un año transcurrido desde las últimas elecciones autonómicas,  y después de varios intentos, finalmente el Parlamento de Andalucía ha admitido a trámite la Iniciativa Legislativa Popular de reforma de la Ley Electoral propuesta por UPyD. Desde este sábado, y durante seis meses, la formación política va a llevar a cabo una campaña de recogida de firmas, requisito previo indispensable para su debate en la cámara autonómica.

La Ley electoral, salvo pequeñas
modificaciones, permanece inalterable
En nuestra Comunidad, la actual Ley Electoral está inspirada en la Ley Electoral General, creada durante la Transición y elaborada ad hoc (siguiendo el llamado sistema D´Hondt) como un procedimiento que favoreciera la existencia de unos partidos fuertes que garantizaran la gobernabilidad en ese delicado momento de nuestra historia, pero que a cambio sacrificó la libertad de elección de los ciudadanos y la proporcionalidad. Las consecuencias de su aplicación pasado el tiempo se pueden constatar: más de treinta años sin alternancia en el gobierno andaluz que han dado lugar a situaciones de corrupción institucionalizada como las que recientemente estamos conociendo. Una normativa que además ha omitido el pluralismo político existente y, junto a él, la participación política real de los ciudadanos.

Teniendo en cuenta la situación actual, no resulta muy democrática una la ley electoral como la vigente, en la que, aparte de excluir a formaciones denominadas “minoritarias” (aunque estas hayan obtenido miles e incluso cientos de miles de votos, como ocurrió en las últimas elecciones andaluzas con UPyD, PA y EQUO), se ejerce el derecho a voto condicionado por un procedimiento de listas cerradas. En este sentido apunta otro de los puntos de la ILP presentada por UPyD. Se propone el desbloqueo de las mismas, de tal manera que sean los ciudadanos los que designen directamente a sus representantes, reflejando sus preferencias mediante un sistema de elección sencillo cuya finalidad es que los parlamentarios trabajen y sean valorados por la ciudadanía, no por la estructura de los partidos.

La recuperación del régimen de incompatibilidades de alcaldes y presidentes de diputación, la reducción de los gastos electorales subvencionados o una adecuada utilización de los medios de comunicación públicos durante la campaña electoral son otros de los aspectos de la propuesta. Una iniciativa que parte de una formación  concreta pero con el ánimo de implicar a todo el mundo, con independencia de su ideología política, ya que la democracia es de todos, y la voluntad y la responsabilidad de que nuestras instituciones sean democráticas también.

3 comentarios:

  1. No solo es necesario, es urgente, ademas de necesario

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  2. Hombre, pero no nos digáis que todo esto es para hacerlo más democrático y luego pidáis que se de "una prima" al ganador para "propiciar la gobernabilidad".

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  3. Si UPyD hubiera obtenido representación en el parlamento andaluz, como debería haber sido por número de votos, se habría eliminado las "primas" de los partidos constituyentes de gobierno. Es algo por lo que este partido lucha. Habría que informarse antes de dar una opinión sin fundamento

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