Y Amat habló y negó por tres veces

Elena Torres

Periodista / Teleprensa

Le costó arrancar, pero de la que lo hizo no dio tregua. La metedura de pata de la concejala popular Eloísa Cabrera mostrando un recibí falso de Hispano Almería con la firma del concejal de Izquierda Unida, Juan Pablo Yakubiuk, bajo la cifra de 8.000 euros, para frivolizar sobre el asunto que investiga la Fiscalía Superior de Justicia de Andalucía, obligó a reaccionar al alcalde de Roquetas de Mar. Gabriel Amat negó por tres veces. Aseguró no haber recibido él dinero de ninguna empresa, así como tampoco el PP de Almería o de Roquetas de Mar. Mantiene que las cuentas están claras y anima a la oposición a que pase por el Ayuntamiento y revise todos los expedientes de obras realizadas por Hispano Almería.

Amat y Cabrera

Amat se expresó rotundo pero lamentablemente eso no demuestra nada. Y mucho me temo que las cuentas visibles del PP o del Consistorio, esas a las que siempre se alude, las que se mandan al Tribuanl de Cuentas, tampoco ayuden. Las tramas de guante blanco suelen taparse muy bien.

El presidente del PP ha dejado claro que no va a hacer más valoraciones al respecto, consciente de que hablar sobre el tema o salir a contestar a la oposición no es sino dar 'vidilla' a un asunto demasiado turbio con el que no está dispuesto a lidiar públicamente. Se reserva su intervención en los juzgados. Faltaría más.

Estoy con Amat en el poco valor que tienen las comisiones de investigación, y hasta en que son un circo, aunque no deja de preocupar que eso lo diga él cuando en su partido han clamado por ellas y no pararon hasta llevar a cabo la de los EREs. Lo que pasa es que el circo gusta depende de quién sea el payaso.

Así las cosas sólo nos queda clamar una vez más por la eficiencia de la justicia, y rapidez a poder ser, para que nos clarifique cuanto antes que ha pasado. Porque a mi eso de negarlo todo tampoco me ayuda. Recuerdo haber entrevistado a la autora de un crimen en Los Almendros cuando aún se desconocía la autoría y los lloros de desconsuelo por la pérdida de la pequeña que ella misma había contribuido a asesinar. Y sin ir más lejos, hasta en la Biblia tenemos a un discípulo que negó por tres veces a Jesús.