Con el vuelo a Sevilla el PP queda retratado

José Luis Sánchez Teruel

Secretario General del PSOE de Almería

Los almerienses tenemos que alegrarnos de que el Gobierno de Rajoy haya hecho los deberes que tenía pendientes a partir de la enorme presión social y política que ha sufrido la conexión aérea entre Almería y Sevilla para que no se interrumpa. El que el Ejecutivo del PP haya alcanzado un acuerdo con una compañía para que opere sin recibir financiación pública, mientras que se sigue con la tramitación necesaria tras la declaración de servicio público de la línea, pone de manifiesto quién había creado el problema y quién debía de poner la solución. 

Un avión de Air Europa
cubrirá provisionalmente el trayecto

Esta medida provisional arbitrada viene a demostrar que la responsabilidad del error por el que el vuelo se iba a suspender era única y exclusivamente del Gobierno central, al igual que la competencia para encontrar el modo de salir del lío que ellos mismos crearon por su dejación a la hora de declarar como servicio público la línea. A pesar de que desde el PP y desde el propio Gobierno de España hayan querido distraer la atención, tratando de poner el foco del problema en la Junta de Andalucía, con la gestión realizada han dejado en evidencia que eran ellos mismos, y nadie más, los que tenían que encontrar la manera de arreglar su entuerto.

En todo este asunto subyace, además, la gran descoordinación que ha habido entre el propio Gobierno y los representantes del PP en Almería, ya que las últimas declaraciones realizadas por la Delegada del Gobierno en Andalucía, la abderitana Carmen Crespo, antes del anuncio de Fomento, iban por libre y ponían sobre la mesa que desde Madrid ni le cuentan nada ni la tienen en cuenta a la hora de buscar soluciones a los conflictos en nuestra tierra.

Tanto los parlamentarios como los diputados por el PP de Almería se fueron pronunciando también en los últimos días instando a la Junta de Andalucía a que buscara una salida que no le correspondía, sin que al parecer supieran que sus propios compañeros de partido en el Gobierno ya la habían encontrado por tratarse de su competencia.

La buena noticia, en cualquier caso, es que seguimos con vuelo, lo que merece el reconocimiento de los que hemos estado luchando para que así fuera, pero la mala es que todos hemos visto que el PP se ha convertido en una jaula de grillos en la que la que nadie habla con nadie ni trabajan de forma coordinada para lograr desatascar lo que se necesita y cuando se necesita.