Desistir del convenio de la Plaza Vieja es una temeridad

Laura Rodríguez-Carretero

Portavoz de UPyD en Almería

La reciente renuncia del Consistorio al acuerdo con la Junta, a través de una carta remitida a la Consejera de Fomento, supone un ejercicio de imprudencia y mala praxis. Resulta intolerable que, tras casi nueve años sin solucionar la gestión de las obras, el Ayuntamiento dé un golpe de timón y asuma tanto la ejecución como toda la financiación del proyecto con un dinero que es preciso para otras necesidades de la ciudad y a las que no se le presta la misma atención.

Ayuntamiento

Es inadmisible se tome la decisión de asumir los costes de unas obras de tal magnitud mientras que la deuda municipal crece año tras año, debido en gran parte a inversiones ruinosas en infraestructuras como aparcamientos subterráneos o a sentencias condenatorias por mala gestión que obligan a grandes desembolsos, por citar algunos ejemplos.

Este "arranque" del alcalde no sería sino una cortina de humo para camuflar el fiasco del Mesón Gitano, ya que corre cierta prisa por emplear el dinero de los fondos del Plan Urban antes de su finalización. El Ayuntamiento, que ha demostrado carecer de un auténtico Plan B para su proyecto insignia, quiere matar dos pájaros de un tiro: justificar ante la ciudadanía el aprovechamiento de dichos fondos y permitirse el golpe de efecto de plantar cara a la Junta, con intención de obtener rédito político.

En nuestra opinión, decisiones tan importantes y que implican tanto dinero público no deberían tomarse tan a la ligera, y sobre todo, sin haber intentado llegar a una solución consensuada con la administración regional.