Antonio Torres
@AtorresAntonio
Si Gómez Vicente fue el primer
futbolista almeriense que obtuvo dos ligas, con el Real Madrid y con el Betis,
en los años treinta, a Mauricio se le puede considerar como el primer
profesional nacido en la provincia de Almería que fue figura del fútbol
nacional, durante la etapa de la dictadura de Primo de Rivera y los albores de
la II República.
Mauricio |
Cándido Mauricio Sánchez
(Vélez Rubio, 1900-Barcelona, 1952) inició sus éxitos profesionales en el F. C.
Badalona en el año 1919, equipo en el que se mantuvo hasta 1924, año en el que
fichó por el CE Europa, entonces segundo equipo de Catalunya. Fue uno de los
grandes jugadores de la década de los veinte. Llegó a disputar 33 partidos en
Primera División. Debutó en 1928 en un partido amistoso con el F. C. Barcelona
frente al Ferencvaros húngaro. El campo del Europa, Guinardó, tenía capacidad
para 18.000 espectadores y el aforo del campo Chamartín era de 16.500. Conviene
recordar que el campo del Madrid no encontraba en la capital sino en el vecino
municipio de Chamartín de la Rosa, anexionado a Madrid en 1948.
Cándido Mauricio defendió los
colores de la selección catalana de fútbol. Llegó a estar convocado con la
Selección Española, pero no llegó a debutar. Coincidió en la elite con
futbolistas que marcaron el inicio de La Roja con la histórica frase que
retrataba una época de furia, la de José María Belauste en Bélgica: “¡Sabino!
¡A mí el pelotón, que los arrollo!”. El plantel de figuras lo marcaban grandes
nombres como los de Zamora, Samitier, Sesúmaga, Arrate o el extremo izquierdo
del Athletic Club Rafael Moreno, más conocido como Pichichi.
La Selección Española, por
culpa de la crisis económica, no participó en el primer Mundial, disputado en
Uruguay en 1930. El entrenador del combinado nacional, José María Mateos, reconoció
que era un viaje impracticable tanto por la distancia que suponía viajar hasta
Montevideo como por el hecho de que era necesario pedir permiso a los clubes
para que cedieran a sus futbolistas. La Federación desechó participar en el
Mundial de Uruguay alegando precisamente lo que aseguró el seleccionador
Mateos: el viaje en barco era muy largo.
El primer Mundial estuvo
marcado por el boicot. La selección que encendió la mecha fue Inglaterra. Al
conocerse que Uruguay iba a ser el país que organizara el primer Mundial de la
historia, los ingleses recibieron la noticia con incredulidad, ya que ellos se
consideraban los inventores del fútbol.
Mauricio, una vez retirado,
fue entrenador de los dos clubes en los que había jugado como futbolista, el Badalona
y el Europa. El día 15 de julio de 1951 se organizó un festival en su homenaje,
ya que se encontraba mal de salud. Murió en enero de 1952 y La Vanguardia publicó un obituario
glosando su figura y la sociedad catalana le homenajeó una vez más a título
póstumo.
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