El viaje de Susana a Almería

Juan Torrijos

Periodista

Estuvo en Almería doña Susana Díaz. Tengo que reconocerles que no me he enterado de las entretelas de lo ocurrido con su no presencia en Pechina. Las versiones ofrecidas, interesadas ellas, más parecen medias verdades para ocultar la verdadera razón. Pero como la presidenta no pasa desapercibida, o no quiere pasar, nos ha dejado algunas perlas dignas de colgar de su cuello.

La presidenta, con el
alcalde de Albanchez

Doña Susana le pide agilidad a su Gobierno para que acabe la autovía del Almanzora. Una pena que el Gobierno de doña Susana no le haga mucho caso, digo mucho, más bien ninguno, ahí tienen ustedes las obras. No sé cómo tomarme el collar de Susana. A la presidenta le debe pasar lo que a mi señora, se ha fundido una bombilla en el dormitorio, me pide agilidad para que la cambie y lleva esperando la pobre casi un mes.

En Albanchez manifestó que está en contra de la despoblación de los pueblos. A buena tierra vino a decirlo. Albanchez es uno de los municipios que ha visto crecer su población gracias a la aportación de extranjeros jubilados que vinieron a asentarse en el municipio, pero las leyes y normativas de la Junta en materia de urbanismo están poniendo en un brete lo que parecía ser el futuro de muchos pueblos del interior almeriense.

¿Está por cambiar esas leyes y esas normativas la presidenta de la Junta? Eso es lo que necesitan estos pueblos por los que parece tan preocupada cuando los visita. Están bien las palabras y los abrazos, pero los pueblos, querida presidenta, lo que necesitan son soluciones, obras son amores. Si no es el urbanismo rural, ya nos contará lo que piensa para ellos, aunque sería mejor que lo que sea lo pusiera en marcha.

Lo mejor de Susana: Que se deje de historias la Diputación y pague el millón y medio que debe del hospital provincial. Pa que se entere don Gabriel, decimos nosotros. Hasta ahora era el vicepresidente, don Javier Aureliano, el que andaba con el lío del convenio del hospital, con la entrada de la presidenta andaluza en las arenas movedizas hospitalarias. Es de suponer que la contestación le llegará de la más alta autoridad de la diputación provincial.

Vamos, señor Amat, es de imaginar que algo tendrá que contestar a la señora Díaz sobre el agravio cometido por la Junta, según su vice, en el hospital de su propiedad.