Los costes del silencio

Elena Torres

Periodista / Teleprensa

Para haber sido tan ‘tortugas’ a la hora de presentar candidato, han corrido más que las ‘liebres’ para redactar denuncias que aún no pueden ni elevar al órgano correspondiente por no estar constituido. El Partido Popular, que prácticamente ha apurado hasta el último momento para desvelar el secreto a voces de que Miguel Arias Cañete, flamante ministro de Agricultura y que aún ejercerá la próxima semana ya que tiene asuntos pendientes, será el candidato a encabezar la lista al Parlamento europeo, no ha tardado ni 24 horas en redactar una queja por el vídeo que el Grupo Municipal Socialista en el Ayuntamiento de Almería le ha dedicado al alcalde de esta ciudad y senador, Luis Rogelio Rodríguez Comendador, por ‘su mala gestión’. Claro, que la denuncia se tiene que elevar a la Junta Electoral Provincial y ésta aún no se ha constituido.

Parece que la imagen que el PSOE ofrece de Luis Rogelio Rodríguez no ha gustado nada en las filas populares, pero menos nos está gustando a los ciudadanos de a pie que nos enteremos de que el Ayuntamiento de Almería empieza a perder sentencias en las que se le reclaman cifras millonarias por ‘meteduras de pata’ o ‘soberbias’ mal entendidas, que todo está por ver.

La primera de la lista ha sido la concesionaria de cementerios. La ‘tontería’ que ascendía a cinco millones puede llegar a siete por intereses y reclamos varios. Recordemos que la rapidez de la justicia está en entredicho últimamente. Lo peor de todo es que apenas se ha oído la voz del primer edil de la ciudad para explicar lo ocurrido. Sólo la oposición se ha quejado, y no es para menos, porque al parecer el silencio ha sido la tónica durante todo el proceso, un silencio administrativo que nos va a costar muy caro.

El portavoz del gobierno local ha tenido el ‘valor’ de salir al paso en algún medio y deslizar aquello de que esto viene de atrás de otros gobiernos… ¿pero este hombre sabe desde cuando gobierna el PP en la capital? ¡Diez años! Así que lo de la herencia recibida de Rajoy aquí no vale.

A estas alturas estaría bien que nos explicaran cómo hemos llegado a esta situación y cómo se va a afrontar y ya de paso, si es de recibo, si va a rodar alguna cabeza porque en una empresa privada un ‘error’ de esta envergadura le cuesta el puesto a alguien fijo. Ah, y ésta es la primera sentencia firme de toda una lista de litigios aún sin dirimir. Atentos.