Manuel
Cantón González
UPyD-Huércal
Desde
hace unos días la política municipal de Huércal de Almería se ha visto sacudida
por las declaraciones en redes sociales de la concejala Sonia Fernández en las
que informaba de la destitución de sus atribuciones por parte del alcalde de que
todo esto se producía sin que ella tuviera constancia hasta el momento de la
entrega de una baja por enfermedad.
Tal y
como ocurrió con la destitución del anterior edíl del área de Hacienda, todo
esto se está llevando a cabo sin mantener informado a la ciudadanía. Sí, tal y
como están leyendo. Desde el pasado día 9 hasta la fecha de hoy, el equipo de Gobierno
compuesto por el PP-GRINP no ha dado explicación de ningún tipo a lo que está
sucediendo en la casa de todos los ciudadanos del municipio.
Son
muchas las interrogantes que acompañan a lo que está aconteciendo dentro del
Ayuntamiento. ¿Es posible que una baja haga que se retiren las funciones a un
concejal con dedicación exclusiva? ¿Seguirá cobrando la concejala Sonia Fernández
aunque se le retiraran sus atribuciones? ¿Se procederá de este modo cada vez que
un concejal entregue una baja médica?
Pues
sí, este equipo de Gobierno está demostrando que cree que el cortijo es suyo y
que no tiene que dar explicaciones a la ciudadanía, ocasionando esto que las
interrogantes que surjan sean cada día más.
Entiendo
que lo normal, lo lógico en cualquier Ayuntamiento, es que se proceda a dar un
comunicado donde se expliquen los motivos que han llevado al alcalde a tomar una
decisión de este calado, y explicando en qué situación se quedará la actual
concejala, es decir, si es que abandona el equipo de Gobierno, deja de ser
concejala, pasa al grupo mixto, etc.
Es más,
este humilde servidor, como vecino del municipio, exige a los portavoces de los
partidos de la coalición que den explicaciones de manera inmediata e indiquen a
los ciudadanos quién se ocupará de las áreas de las que la señora Fernández se
ocupaba.
No
quiero terminar sin recordar que los políticos están por y para informar y dar
servicio a los ciudadanos. No pueden ni deben llevar los asuntos del municipio
de forma tan tremendamente chapucera y creer que esto beneficia, aunque es
posible que el único beneficio que busquen sea el propio y no el de todos.
Ya se sabe aquello y mucho ha tardado: "dónde tienes la olla, no metas la p...".
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