Luis
J. Pasamar
Secretario
de Política Municipal del Partido Andalucista de Almería
La
electricidad y más aún el agua se han convertido hoy en día en bienes de
primera necesidad, Tenemos, por lo tanto, la obligación de exigir a quienes
gobiernan que regulen el acceso a todos los ciudadanos a estos bienes,
especialmente a los más perjudicados por una cirial de la que solo son victimas,
y lo mismo que se da un trato exquisito a las víctimas del terrorismo de ETA
hay que dar un trato especial a las víctimas de un sistema económico por el que
se empobrece a los ciudadanos para enriquecer a los ricos.
Los Almendros |
Se
trata de justicia social, no de una excepción que se hace por el motivo que sea.
Exactamente eso es lo que ha pasado en Almería con la situación de los vecinos
del barrio de Los Almendros. El equipo de Gobierno se ha comprometido con los
vecinos para procurarles ambos servicios básicos y ha pedido corresponsabilidad
a la Junta de
Andalucía como propietaria de las viviendas.
¿Qué
ha sucedido, ha habido un cataclismo de orden natural que ha destrozado las
tuberías y las líneas eléctricas? Pues al parecer no. Se ve que, según afirman
algunos vecinos, “el enganche” era la forma habitual de tener energía eléctrica
y el agua no la pagaban, por lo que las privadas compañías que suministran
estos servicios no han tenido más remedio que cortar el suministro, como a todo
hijo de vecino.
No
tengo nada en contra de las personas que viven en un barrio económicamente
deprimido. Con lo que no estoy de acuerdo es con que se haga una excepción, en
lugar de hacer una regulación ¿Si una familia que vive, por ejemplo, en la Calle Chantre , o en la Carrera del Perú, no tiene
ningún ingreso o cobra la ayuda esa de los 430 euros y deja de pagar luz y
agua, qué pasa? ¿Es que tienen menos derechos que los otros, o se trata de un
tremendo agravio comparativo? ¿Xenofobia, racismo, clasismo, injusticia?
Quienes
tienen el encargo de todos de gobernar para todos no pueden gobernar
arbitrariamente, dando a unos y no a otros, porque desde que se presentan al
cargo voluntariamente y lo aceptan voluntariamente tienen la obligación de gobernar
con justicia.
Exactamente
eso es lo que pedimos desde el Partido Andalucista, que se gobierne igual para
todos, que nuestro Ayuntamiento aproveche la ocasión y al menos en la gestión
del agua, que es responsabilidad municipal, regule el acceso al agua en calidad
y cantidad mínimas, pues es uno de los derechos que la ONU reconoce para todos los
seres humanos.
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