Elena Torres
Directora de Telprensa.com
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Creo que el Partido Popular aún no es consciente del malestar que embarga al
ciudadano ante los abusos, corruptelas y demás desmanes cometidos por nuestros
políticos durante años. Desde luego, el discurso de la transparencia, el honor y
las buenas formas en Almería ya no se lo cree nadie.
Antonio J. Rodríguez |
La propuesta de un candidato que ya fue alcalde en un municipio de Almería y
que precisamente por su abuso de poder durante su mandato fue condenado e
inhabilitado nada menos que ocho años -su ejercicio como alcalde apenas duró
tres- es toda una provocación. Pretender hacernos creer que éste es el mejor
perfil que el PP tiene para poner al frente de una institución, una indecencia.
También puede ser que en Vícar no tengan muchos seguidores, y por tanto no haya
de donde tirar, o que a quien le correspondería ocupar este puesto tenga
aspiraciones de más alto nivel y una alcaldía en un pueblo del Poniente
almeriense le resulte poco ambicioso…
Antonio Jesús Rodríguez Ruiz habrá cumplido con la justicia pero su falta lo
inhabilita de por vida para cargo público. La propuesta aún tiene que ser
refrendada por el Comité Electoral Provincial, y tal vez su defensor, el
parlamentario Miguel Ángel Castellón, cuya participación va a quedar mermada en
el Parlamento Andaluz estando como está en un partido que tanto gusta tirar de
temas de corrupción para hacer oposición, haya querido lanzar la ‘bomba’ con
tiempo para ver la reacción antes de tomar una decisión definitiva.
Si el PP sigue adelante con la propuesta, no es ya que se ponga en entredicho
al candidato sino que quien se pone en la cuerda floja es el propio partido a
quien cada vez se ve con más descaro y falta de moral ante la corrupción propia
que no con la ajena.
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